El Sporting Atlético se desquicia y entrega el ascenso

Recuperar cabezas y pensar en la vía larga para ascender. Ese es el objetivo del Sporting Atlético de aquí al final de temporada. La tercera derrota del curso en Mareo así lo obligada. Un buen Llanes, que ha reaccionado tras la llegada de Pablo Busto al banquillo, se llevó los puntos de las instalaciones rojiblancas tras un partido que se desquebrajó en la segunda parte. La expulsión de Damián Cáceres en la acción del primer gol visitante desniveló la mañana. Lo igualó el filial pero el Llanes volvió a golpear. Una derrota rojiblanca que, unida a un nuevo triunfo del Llanera, deja a los del Pepe Quimarán a una victoria del ascenso de categoría. 

Mermado por las bajas, empezó algo errático el Sporting Atlético. Algo que aprovechaba el Llanes para dejarse ver por la Escuela de Fútbol de Mareo, con la primera llegada por parte de Álvaro. A pesar de su situación clasificatoria, no llegaba de paseo el equipo de Pablo Busto a las instalaciones rojiblancas. Un 'toma y daca' de inicio en el que los avisos rojiblancos llegaron desde la banda zurda, con Jorge Montes y Álex Lozano como estandartes. 

El paso de los minutos comenzó a abrir un partido hermético en cuanto a ocasiones. Acerete tuvo la más clara antes de llegar a la media hora de juego. Su cabezazo, tras un buen centro de Lozano, se lo quitó de encima como buenamente pudo el exrojiblanco Mateusz. El aviso, serio, no ralentizó a los de San José, que seguían entrelazando buenas jugadas en las cercanías del área de Pablo Díez aunque sin encontrar el descorche final. Pablo Prieto avisaba aunque sin verdadero temor para el portero rojiblanco. 

Se animó la primera parte en la recta final con la llegada más peligrosa del filial. Acerete volvió a recibir desde la banda zurda, en esta ocasión de Jorge Montes. El remate de primeras del delantero gijonés se estrelló contra el palo diestro de Mateusz. Se libraba el Llanes que buscaba la contra antes del descanso, encontrándose con una férrea defensa rojiblanca. 

Tras el paso por los vestuarios, el torbellino. Empezó con picante la segunda parte. Un minuto aguantó sobre el césped Damián Cáceres, después de un control desafortunado y el balón muerto para Sergio Ríos. Ante la posibilidad de una llegada clara, el centrocampista agarró siendo el último hombre. A la caseta. No sería el único castigo. En la falta, el disparo de Fran Pacoli lo detuvo Pablo Díez, el rechace le cayó a Pelayo Pedrayes que la mandó a guardar en el segundo intento. Todo mal en el inicio de segunda parte para el Sporting Atlético. Incluso Sergio Ríos pudo ahondar en la herida con una contra rápida que no pudo finalizar con claridad. 

A pesar del doble golpe, el equipo de Zulaika buscaba levantarse. Pocos minutos después del mazazo, Dacal se iba al suelo en su ingreso en el área tras recibir la entrada de Pedrayes. Penalti tan claro como tan buena fue la parada de Mateusz al lanzamiento de la pena máxima de Acerete. Una mañana de 'nones' en Mareo para los rojiblancos. Pudo complicarla más todavía el mejor llanisco. Sergio Ríos metió la directa hacia portería y nadie lo pudo frenar hasta que su balón se marchó rozando el palo. Gran jugada individual del atacante visitante, el mejor de la mañana, que mereció el gol con una gran jugada individual. 

Cuando el Sporting Atlético parecía que bajaba los brazos, Laine se lo puso en bandeja. Error grave del defensa llanisco para dejar el balón franco para que Marti se dirigiera a la portería y definiera con clase para firmar el empate. Una recompensa con la que se encontró el Sporting Atlético en una pobre segunda parte. Algo que terminaría pagando en los minutos finales. Un nuevo penalti, en esta ocasión cometido por Jorge Montes con una mano dudosa, lo transformó Sergio Ríos para poner al Llanes por delante a dos minutos del final. Derrota merecida de un Sporting Atlético que ya mira al playoff. El Llanera, tras vencer en Pola de Lena, podría ascender el próximo fin de semana. Una victoria de los arlequinados ante el Gijón Industrial desataría la fiesta en el Pepe Quimarán. Está al caer.