El Molinón y la afición del Sporting vuelven a responder y con creces
El Sporting cerrará el año en su estadio que suma 17.788 espectadores de media y un aumento más que considerable en el transcurso de la temporada
Luis Manso
Se baja el telón de una temporada más en El Molinón-Enrique Castro Quini. El feudo rojiblanco ha vuelto a vivir una temporada lejos de los objetivos pero que ha servido para refrendar al campo asturiano como uno de los más activos en la Segunda división. La visita de la SD Ponferradina supondrá el 21º partido de El Molinón en liga y con él se cerrará un curso de aumento más que notable en la afluencia al estadio. La afición del Sporting de Gijón vuelve a estar a la altura.
Con el duelo del domingo ante el cuadro berciano, el Sporting finalizará su periplo por el curso liguero. Hasta entonces, el cuadro rojiblanco ha disputado 20 partidos en casa con un total de 355.755 espectadores que se han pasado por El Molinón. Una media de 17.788 espectadores por partido que sitúan al estadio del Sporting como el cuarto con mayor regularidad en Segunda división. El estadio de Gran Canaria (20.287 espectadores de media), La Rosaleda (18.836) y La Romareda (18.357) son los únicos recintos que han superado al campo gijonés.
El Molinón ha vuelto a vibrar con el Sporting y, en parte, también ha recobrado parte de la ilusión. A pesar del incremento en los abonos tras la llegada del Grupo Orlegi, la afición aceptó el reto hasta superar los 20.000 abonados y lo consiguió. El equipo no terminaba de conseguir resultados y el reto volvía a ser salvar la categoría. Pese a ello, la afluencia a El Molinón no se vería resentida en los últimos partidos. 18.746 aficionados el día del Alavés, 19.769 el día del Lugo y 24.790 en el derbi ante el Oviedo.
Unas últimas entradas que han supuesto un importante repunte en el total de aficionados. El Sporting alcanza, a un partido de terminar la temporada como local, los 355.755 espectadores en el total de la campaña 2022/2023. La comparación con el curso anterior resulta significativa. En 21 partidos como local, El Molinón acogió a 287.459 aficionados. Un aumento de cerca de 68.000 espectadores más. Casi nada.
Y todo ello con el equipo peleando por no descender a Primera RFEF. El Molinón ha vuelto a demostrar ser un pilar más en el funcionamiento del Sporting de Gijón. En el encuentro ante el Alavés, la comunión con el equipo de Ramírez fue total. También en el derbi asturiano, como reflejaron los jugadores a la llegada del autobús al estadio.
De esas imágenes se pasará a una diferente el próximo domingo. Un encuentro con nada en juego para el Sporting y para la Ponferradina apunta a propiciar una entrada baja en El Molinón. Coincidiendo además con el día en el que millones de asturianos están llamados a acudir a las urnas, el choque podría reflejar una bajada en la media de espectadores. No lo pretende así el Sporting que volvía a lanzar una promoción de entradas para poblar las gradas de El Molinón. Un estadio que, un año más, vuelve a estar por encima del rendimiento en el césped.
