La Crónica: Al Sporting se le vuelve a hacer de noche en Zaragoza

Era un día para levantarse y se le hizo de noche. El Sporting de Gijón cayó derrotado en La Romareda tras un mal partido en el que siempre estuvo a remolque del buen equipo de Juan Carlos Carcedo. Los rojiblancos no encontraron forma de hacer daño a un rival muy bien plantado y se volvieron de vacío. Víctor Mollejo se aprovechó de un nuevo error defensivo de Insua para darle la victoria al Zaragoza ante un Sporting que volvió a flaquear por tercera semana consecutiva. 

Modificó Abelardo el plan para buscar remendarse del error cántabro. Diego Sánchez fue el elegido para sustituir a Cote y Aitor sustituía a un cansado Dani Queipo. El inicio de partido dio paso a un monólogo zaragocista que se extendería a lo largo de la primera parte, con pequeñas intentonas rojiblancas que causaron pequeños sustos. La primera fue rojiblanca, con un balón cruzado de Djuka al que no llegaron ni Otero ni Aitor García. La respuesta del Zaragoza fue feroz.

Primero fue Manu Molina el que limó la escuadra de Mariño con un disparo muy lejano y potente. El susto tambaleó al Sporting, que comenzó a cometer fallos en el apartado defensivo. Dos consecutivos de Cali Izquierdoz permitieron al conjunto maño llegar con claridad en dos ocasiones. La primera, repelida por Mariño. La segunda, muy cruzada por Simeone. El hijo del 'Cholo' también lo intentó tras un saque de esquina, aunque su disparo lo atajó sin problemas el capitán rojiblanco. 

El dominio era total del equipo local y el Sporting intentaba estirarse. Buscó su conexión predilecta Pedro Díaz a balón parado, pero Gragera remató muy suave a los guantes de Cristian Álvarez. El Zaragoza se volvió a desperezar y volvió a amasar el balón en las inmediaciones de Mariño. Al portero del Sporting le exigieron en dos ocasiones tanto que le obligaron a pedir incluso asistencia médica. O un tiempo muerto para su equipo, depende de como se mire. Con lo mejor de la primera parte, el empate, el Sporting se fue al vestuario. 

La pequeña alegría duraría bien poco. Lo que tardó el equipo de Carcedo en plantar a Víctor Mollejo delante de Mariño. El asistente le negó la celebración pero Insua se la brindó. Otra vez, tercera consecutiva, el central gallego habilitaba al delantero rival para poner al Sporting por detrás en el marcador. Le tocó remar a contracorriente al equipo de Abelardo que cerca estuvo de encajar el segundo en una contra en la que Mollejo no atinó con la definición. 

Retiró Abelardo, para sorpresa, de Djuka. La entrada de Milo buscaba dar más altura al ataque, pero los balones no eran claros. Medió Abelardo entre la expulsión y Insua. La rozó en dos ocasiones así que el entrenador le dio la alternativa a Bamba. Con la entrada del atacante serbio, el Sporting frenó de colgar balones. De un balón aéreo llegó la más clara. De nuevo Pedro. De nuevo Gragera. En un remate franco ante la portería de un vencido Cristian Álvarez, el '6' falló lo que no acostumbró a fallar. 

Con algo más corazón que de cabeza, lo intentó el equipo de Abelardo pero la claridad ofensiva brilló por su ausencia en la noche de La Romareda. El Sporting cayó por segunda jornada consecutiva, evidenciando que las cosas no eran tan bonitas como se pintaban en las primeras jornadas. Mucho que mejorar y mucho margen de reacción para un Sporting al que los aires de la 'Ciudad del viento' no le sientan bien.