La Crónica: El Oviedo se queda sin ascenso en Cornellá

El sueño tocó a su fin. El Real Oviedo puso el cierre menos deseado a la temporada con una derrota en Cornellá ante el Espanyol (2-0) que mete a los pericos en Primera división la próxima temporada. Javi Puado fue verdugo por partida doble para los catalanes en la primera parte tras dos errores defensivos del conjunto carbayón. Lo intentó el Oviedo en la segunda parte aunque no tuvo ocasiones hasta el descuento. Ahí la tuvo el capitán. Ahí la tuvo Borja Bastón. Perdonó el '9' y festejó el Espanyol. El Oviedo está más cerca de Primera división que cuando empezó la temporada. La ilusión de la gente, lo vivido en el oviedismo en la recta final. Camino andado y que tocará volver a andar a partir de agosto. 

Bajo un ambiente digno de lo que estaba en juego, el Oviedo y el Espanyol arrancaron un partido de vibraciones. Las primeras las puso el conjunto local, amenazando con las trombas sobre el área de Leo Román. No fue el inicio más fulgurante de los de Manolo González en este play off, pero sí una declaración de intenciones. La primera ocasión fue perica aunque no fue tal por la irrupción de Dubasin. El atacante azul le robó la merienda a Pere Milla cuando el lateral ya se relamía dentro del área. Salvador el pingüino. 

Empezaba el Espanyol a encorsetar al Oviedo contra su propia red. Los saques de esquina se sucedían sobre el área de Leo Román, con el conjunto de Carrión soportando estoicamente el bombardeo. Las salidas eran lentas por parte azul, sin posesión y con intentos de contra que no fructificaban en las botas de Alemao. Lo hizo bien en una salida a la contra el brasileño, arrancando la cartulina a Cabrera. El Espanyol empezaba a desesperarse con el tiempo, el Oviedo jugaba bien sus cartas.

Se desperezó el conjunto azul del arranque del Espanyol con las primeras llegadas asturianas. Los catalanes se ponían negros con Cordero Vega, que permitía jugar con buen criterio. Aparecía con cuentagotas el ataque perico, catalogado como el mejor de la categoría. Melamed no conectaba con claridad un pase filtrado a la frontal. Otra al aire para resoplido carbayón.  

Con el Oviedo oliendo el descanso, llegaron los sopapos. El primero, nacido desde la esquina. Un buen reducto de la defensa azul se vino abajo. El balón parado fue cicuta para los intereses carbayones. Mala marca de Jaime Seoane para que Puado rematara con el pie un córner en el área pequeña. Un mazazo que no llegó solo. Dos jugadas después, Pere Milla le ganó la espalda a Viti y volvió a conectar con el capitán blanquiazul que volvió a perforar la portería de Leo Román. Tremendo. Pero había vida. 

Quiso cambiar el paso del partido Carrión con la entrada de Bretones y Borja Sánchez. 'El Mago' tuvo la primera al poco de arrancar con un balón suelto que se le fue arriba. Era un buen presagio, tenía que avisar el Oviedo. Ante el buen inicio asturiano, el Espanyol buscaba contrarrestar por medio de Braithwaite, desapercibido durante el choque. El danés cruzó el balón en exceso y tampoco Nico Melamed pudo llegar al balón. Cosas que podían pasar, lógicas por el resultado. Pero el Oviedo era otro. 

Enmudeció Cornellá cuando Carrión mandó a calentar a Cazorla. Más todavía cuando el '8' entraba al campo. Quemaba las naves el banquillo azul con la entrada de Santi y de Masca, hombre gol por excelencia de la plantilla carbayona. Si ya estaba mejor, la entrada del Lugo de Llanera desniveló la balanza. El Oviedo se volcaba pero no pasaba por caja. Seoane dejaba lesionado su puesto a Borja Bastón, con todo el arsenal ofensivo Carrión sobre el césped. Era ahora o nunca. 

No llegaba el Oviedo a inquietar. El Espanyol pudo sentenciar a falta de cinco minutos pero Aguado falló lo infallable. Era una bala más para los azules. No las gastó en todo el partido y se guardó el disparo para el descuento. Borja Sánchez hizo dudar a Joan García, que le dejó el balón franco a Borja Bastón. El capitán carbayón la estampó contra el meta catalán. Y con el balón se esfumó el sueño del ascenso de una forma cruel. El Oviedo volverá. O mejor dicho. Ya ha vuelto.