La Crónica: El Oviedo sigue de dulce en el Tartiere 

De tres en tres en casa y tiro porque me toca. El Real Oviedo sigue intratable en el Carlos Tartiere y consigue su sexta victoria consecutiva en casa ante un combativo Tenerife (3-1). Tiraron los azules de pegada en los primeros compases para defender la renta después. Sibo y Hassan abrieron la lata, Escandell la sostuvo deteniendo un penalti y Seoane puso el de la confirmación. Una nueva victoria que sirve para colocarse en ascenso directo, a falta del encuentro del Zaragoza. 

Saltaron los futbolistas al césped con un Tartiere de gala, que celebraba el XXX aniversario de Symmachiarii con un gran tifo haciendo referencia a El Padrino. El lema, “Todo por la familia”, lo que demostró la hinchada con los suyos durante los 90 minutos.. Sobre el verde, la única novedad era la presencia de Lucas por la banda izquierda.

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Desde el principio, el Oviedo ya demostró su potencial. Avanzó Hassan por la banda, se fue de su par y la puso al corazón del área, donde Alemão remató desviado con todo a favor. Los tinerfeños tenían claro su plan de partido con un 5-4-1 bien marcado atrás y buscándole las cosquillas a Lucas. Hasta que lo encontraron. El lateral carbayón recuperó en campo propio y asistió a Sibo para enviar un zapatazo a la red. Le pegó de interior y sorprendió a un Salvi Carrasco que pudo hacer más. El ghanés lo celebró, en su put*a casa, escanciando sidra. 

Y a base de pegada el Oviedo amplió diferencias. Esta vez el más listo de la clase fue Chaira, que sacó rápido de banda, y Alemão hizo prácticamente el resto. El brasileño avanzó por la banda, recortó y disfrazado de Cazorla le regaló el tanto a Hassan, que solo tuvo que meter la puntera de la bota en el segundo palo. Extraña fue su celebración, en la que mandó callar e hizo gestos de hablar hacia la grada. Habrá que preguntarle los motivos. 

Se quedó noqueado el Tenerife y los azules estaban en busca del tercero. Cazorla tuvo su oportunidad con un disparo de falta peligroso que se fue rozando el palo largo. Y poco después, malas noticias. Alemão, visiblemente dolorido, tuvo que retirarse por un golpe en la cadera. En su lugar entró Paraschiv. El cambio fue un punto de inflexión y desde ese momento los visitantes dieron un paso al frente. 

Jaime Vázquez estuvo providencial para taponar un disparo de Enrich Gallego solo ante Escandell. Luismi Cruz creció en el partido y de un disparo suyo de la frontal los de Pepe Mel consiguieron un penalti. El balón tocó en Sibo, que tenía la mano separada, y tras una larga revisión Cid Camachó señaló penalti. Parecía que el balón tocaba antes en su pierna, pero el colegiado no tuvo dudas. Y desde los 11 metros Aarón Escandell volvió a hacerse grande para detener su disparo al medio de Cruz, que tampoco estuvo fino en el rechace para recortar diferencias. 

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— Real Oviedo (@RealOviedo) November 17, 2024

Tenía mucho que cambiar el Tenerife en el segundo acto y Pepe Mel, además de dos cambios, modificó el sistema para jugar con un 4-2-3-1. Y los tinerfeños tuvieron varias acciones peligrosas para recortar diferencias a las primeras de cambio. Gayá y, sobre todo, un cabezazo de Diarra que se fue rozando la meta de Escandell. También tuvo otra gran ocasión Cazorla tras una buena acción individual de Hassan, pero Salvi la desvió con la yema de los dedos para evitarlo. 

Refrescó Calleja el partido con la entrada de Sebas Moyano y de Seoane. Y los cambios no le pudieron salir mejor. 10 minutos después, el centrocampista madrileño combinó con el cordobés, se zafó del defensor con un autopase y definió con tranquilidad para batir a Salvi Carrasco y hacer rugir al Tartiere con el 3-0 a falta de 20 minutos para el final. La respuesta de Calleja, dar descanso a Cazorla y Colombatto y hacer debutar a Federico Viñas, que se llevó una ovación de la hinchada carbayona. 

Tuvo Paraschiv dos buenas ocasiones para seguir ampliando la ventaja, pero fue el Tenerife el que recortó diferencias. José León se impuso en una falta lateral y su remate de cabeza pasó lamiendo el poste. Y la cosa pudo ser peor en la recta final con varios acercamientos peligrosos que, por momentos, hicieron dudar a los azules. Finalmente, los tres puntos se quedaron en casa, como de costumbre, y el Oviedo sigue la estela del líder con un Carlos Tartiere que lo lleva en volandas en la lucha por todo.