La Crónica: El Sporting no se entiende a sí mismo

Despropósito rojiblanco en Butarque. Un partido que empezó torcido con un gol en la primera llegada del Leganés y que terminó con los rojiblancos centrando balones al área por medio de Cali Izquierdoz. Un sinsentido generalizo que ajustició al equipo de Ramírez, sin pegada ni capacidad para entender los conceptos tácticos de su entrenador. A pesar de jugar durante una hora con un jugador más, hasta que el árbitro expulsó injustamente a Guille Rosas. Una de las peores tardes de la temporada que deja tocado al Sporting. 

Con un sistema rompedor en el Sporting, con Cristo ocupando el puesto de volante, empezó un duelo importante en Butarque. Y esa importancia se la dio el Leganés en la primera jugada. Córner que defendió francamente mal el equipo de Ramírez, dejando un balón franco en el área para Dani Raba. El cántabro golpeó a portería y Juan Muñoz acompañó su disparo ante la pasividad rojiblanca. Inicio fatal para la tarde en Butarque. 

El inicio pudo ser peor si Franquesa llega a atinar con un balón suelto en el área después de otra jugada de pasividad defensiva. Fue otro síntoma de la incomparecencia inicial del Sporting de Ramírez. Los jugadores buscaban explicaciones entre ellos para situarse en el campo. Un caos organizativo en el que muy pocos sabían su ubicación en el césped de Butarque. Cristo era el máximo exponente del caos rojiblanco. 

Empezó a mejorar el Sporting muy levemente y Gaku se empeñó en meter a los rojiblancos en el partido. Entrada con los tacos por delante sobre Nacho Martín y el nipón se fue expulsado VAR mediante. La acción desquició al Leganés que se hinchó a cartulinas amarillas. El Sporting no dio una marcha más en la recta final de la primera parte. Un descanso que llegó con otra expulsión. Jony, por una protesta, se fue al vestuario sin pasar por el césped. 

Con la entrada de Cote, los rojiblancos crecieron. El lateral de Roces generó más peligro en los primeros instantes de la segunda parte que en toda la primera mitad rojiblanca. Se encargó de servir balones al interior del área y a ser profundo por su banda aunque los compañeros no acompañaban. Metió Ramírez a Djuka para cunplir con esa labor, sin que se produjeran llegadas. Se cumplía más de una hora de partido y el Sporting no había sido capaz de probar a Asier Riesgo. Si lo hizo Pedro con un disparo a media distancia. 

Debutó Jeraldino cuando MAR quemó naves renunciando a la línea de cinco. La respuesta del Leganés estuvo cerca de ser aniquiladora. Dos errores de Cuéllar rozaron el segundo gol de Leganés, pero la suerte se alió con el portero rojiblanco. La misma que fue esquiva con Jeraldino en el primer balón que tocó el chileno. Un centro perfecto de Marsá, de lo poco rescatable en Butarque, la despejó el delantero rojiblanco en boca de gol. Sin suerte. 

Tampoco la tuvo Guille Rosas con una expulsión que olía más a compensación que a reglamento. El Sporting terminó como empezó, desordenado, con Cali Izquierdoz siendo el encargado de centrar balones a que nadie los rematara. Carrillo lo buscó pero sin éxito en un gran remate de cabeza que obligó a Riesgo a volar. Una derrota sin paliativos dentro de un caos organizativo y que deja al Sporting mirando hacia abajo.