La Crónica: Los errores condenan al Oviedo en Cádiz

Más de un mes después, el Real Oviedo perdió su racha de siete encuentros consecutivos sin conocer la derrota. Lo hizo ante el Cádiz, penúltimo clasificado al comenzar la jornada y que aún no había conocido la victoria como local. No fue el día de los azules en el Nuevo Mirandilla, lejos de la versión ofrecida estas últimas semanas y castigados por varios errores muy graves en las acciones de los goles. Moyano le brindó el primero antes del descanso y Ramos sentenció completamente solo. 

Tercer encuentro en siete días y Javi Calleja tan solo introdujo tres cambios en el once inicial. Oier Luengo, Del Moral y Moyano fueron las novedades de una alineación en la que volvía a partir Cazorla una semana más. En el Nuevo Mirandilla se vivió una previa un tanto inusual, con la hinchada cadista protestando contra la propiedad e incluso pitando a los suyos durante el himno por la mala situación clasificatoria. Había motivos para ello, aún no habían ganado en casa este curso hasta hoy. 

Consciente de eso sabía el Oviedo la importancia de empezar fuerte, pero fueron los locales los que salieron con una marcha más y presionando arriba. Iza fue el primero en avisar y Alcaraz probó a Escandell con un remate centrado. No estaba cómodo el conjunto azul y el Cádiz crecía a través de las individualidades, con Ontiveros y Ocampo vertiginosos por sus bandas. Con el paso de los minutos empezó a tener más el balón el equipo carbayón, que tuvo su primer acercamiento a través de Moyano en el ecuador del primer tiempo. 

Sin estar desplegando un buen fútbol sobre el Nuevo Mirandilla, la sensación era que el Oviedo tenía el partido controlado. Y en el 39’ todo se pudo poner de cara. Moyano conectó con Alemão al espacio y este pudo quedarse mano a mano, pero el balón se fue frenando y el brasileño tuvo que devolvérsela. Estaba el cordobés relamiéndose para empujarla y apareció Iza providencial para desviar el balón a saque de esquina.  

Y cuando perdonas, lo pagas. Y si encima cometes un grave error, más aún. De nuevo los mismos protagonistas, pero a la inversa. En una acción sin aparente peligro, a Sebas Moyano se le escapó el control dentro del área, Escandell se quedó en tierra de nadie e Iza Carcelén, salvador hace escasos minutos, remató con el exterior para adelantar al Cádiz en el añadido del primer tiempo. Duro golpe para el Oviedo, que se iba por debajo al descanso. 

Salió con otros aires el Oviedo en la segunda mitad, consciente de que tenía que hacer mucho más si quería ganar, y Cazorla puso a prueba a David Gil con un disparo al palo corto que logró desviar el meta. Poco después, Chaira le brindó un gran pase a Alemão, que en boca de gol no consiguió empujarla. Estaban apretando los azules y antes del 60’ Calleja realizó tres cambios. Hassan, Cardero y Sibo, al verde. Se iban Cazorla, Del Moral y Moyano. 

Los cambios no le sentaron bien al Oviedo y el Cádiz, que tenía claro su guión de partido, comenzó a merodear más la portería de Escandell. Por si fuera poco, comenzó a llover con mucha intensidad sobre el Nuevo Mirandilla y se notó en la lenta circulación del balón. A falta de 20 minutos para el final, Calleja agotó todo su arsenal con la entrada de Masca y Paraschiv. Faltaba llegar al área rival. 

No llegó el Oviedo, pero sí el Cádiz. En una jugada trastabillada en la que el Oviedo reclamó hasta dos faltas sobre Hassan y Colombatto, Rubén Alcaraz se sacó de la chistera un zapatazo para poner el 2-0 desde la frontal del área. Estaba el encuentro finiquitado, pero el VAR llamó a Apezteguía y el navarro acabó anulándolo por un codazo sobre Colombatto en la acción previa. El alivio duró poco, pues en la siguiente acción Chris Ramos certificó la sentencia en otra acción muy mal defendida por los azules. Remató solo el ariete gaditano en una falta lateral. Ahí se acabó el partido. Trató el Oviedo de recortar diferencias pero ni siquiera se acercó a la meta de Gil. Mal encuentro de los azules, que pierden su buena racha de siete encuentros consecutivos sin ganar