Sporting
1
2
Valladolid

Derrota injusta con sabor a Primera

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Fran Villalba
Fran Villalba intenta un disparo a portería.
Vie, 05/11/2021 - 17:28

Cayó con poco reproche. El Sporting sumó su segunda derrota consecutiva, aunque las sensaciones fueron bien distintas a las de Cartagonova. En una velada a golpes, el Valladolid conectó más directos que un combativo Sporting al que le faltó la pegada que se le exige a los grandes campeones. A pesar del veredicto final, el cuadro de Gallego no tiro la toalla, un viso de esperanza para lo que está por venir.

La tarde en El Molinón tenía aires de Primera División. La mejor entrada en el feudo gijonés de lo que va de temporada vino de la mano de un inicio fulgurante, en el que el Valladolid y el Sporting salieron a morder desde que sonó la campana. Ambos se encontraron con el mismo obstáculo. El palo impidió que Aitor García y Weissmann inauguraran el marcador con sendos remates cuando el partido no había echado a andar. El Sporting se encontró cómodo en el intercambio de golpes, aguantando el tipo y lanzando ataques, aunque sin encontrar el destino deseado. Si lo encontró Alvaro Aguado tras una mala decisión de Bogdan. Desafortunado el ucraniano con su despeje, el balón terminó en las botas del centrocampista pucelano que puso el balón donde no llegó el que siempre suele llegar. Imparable para Mariño, jarro de agua fría para la afición rojiblanca y éxtasis vallisoletano en la esquina visitante.

Tras el gol, el dominio fue para los de Pacheta. Con el control del balón, protegía el resultado el equipo castellano. Aunque sufría. O Djuka los hacía sufrir. El montenegrino fue un dolor de muelas para la defensa rival, forzando tarjetas a diestro y siniestro. En una de ellas, El Molinón festejó antes de tiempo. Era la segunda para un Luis Pérez que ya se veía camino del vestuario antes del descanso. Así lo vio el colegiado también que hizo el ademán de mostrarle la cartulina.
Se quedó en el gesto. Algo que enfureció al público y a David Gallego, molesto por algo que pudo ser pero no fue. Camino a vestuarios con música de viento resonando en los tímpanos del canario Pulido Santana.

Ante el riesgo, actuó Pacheta. Retiró a un absuelto Luis Pérez para evitar males mayores. También remodeló la defensa, retirando amonestados para dar entrada a ladrillos para componer el muro. Una barrera que cerca estuvo Gaspar Campos de derribar en dos ocasiones. La primera, se la negó Roberto. La segunda, la rosca del balón que no quiso ir al ángulo. La máxima del fútbol volvió a hacer efecto y, ante el perdón rojiblanco, el Valladolid se cobró el regalo. Volvió a faltar contundencia en Bogdan, Gragera pecó de exceso de confianza con un despeje de tacón y Plata, agradecido por la asistencia, no le hizo el feo a tal presente y reventó la red de Mariño, previo toque en Pedro Díaz.

Cuando parecía que el Sporting besaba la lona, Djuka conectó un directo. Desde la zurda la puso un centenario Aitor García, el mejor con camiseta rojiblanca, buscando al nuevo arma del montenegrino. Su cabeza, esa que ha perfilado en Mareo, volvió a ser certera. Quinto gol de la temporada, segundo con la testa y un chute de energía para El Molinón. Se vino arriba el público, pero el equipo no le dio motivos para alcanzar el éxtasis. Lo intentó Villalba, secado por el centro
del campo del Valladolid, personificado en un rudo Roque Mesa, que cerca estuvo de dejar al Sporting huérfano de magia valenciana. Aguantó el tipo, cojo, Villalba, pero ni así pudo el Sporting sumar. Dos partidos, dos derrotas pero sensaciones distintas. Que el golpe sirva para levantarse con más fuerza.

Sporting
  • Mariño
  • Bogdan
  • Babin
  • Marc Valiente
  • Pablo García
  • Pedro Díaz
  • Gragera
  • Aitor García
  • Fran Villalba
  • Gaspar Campos
  • Djuka
Valladolid
  • Roberto
  • Luis Pérez SC
  • Joaquín
  • El Yamiq
  • Olaza
  • Óscar Plano
  • Aguado
  • Roque Mesa
  • Plata
  • Sergio León
  • Weissman