El Sporting cumple sus deberes y certifica la permanencia

El Sporting de Gijón ha hecho sus deberes este sábado en Ipurúa, donde sumó ese punto que necesitaba para no mirar de reojo al Málaga. Djuka, de penalti en la primera parte, y Aitor García, con un golazo desde su propio campo en el segundo tiempo, adelantaron a los de Ramírez. Los locales, eso sí, reaccionar en el tramo final para hacer el empate. 

Sin Pedro Díaz en la alineación, con defensa de cuatro, el Sporting comenzó bien, sin apuros en defensa, y con mordiente para armar el contragolpe. Fue así precisamente como llegó la acción del penalti sobre Juan Otero. El colombiano se fue al suelo ante Berrocal y el colegiado señaló la pena máxima. Lo revisaron en el VAR, a Busquets Ferrer le llamaron al monitor, revisó una posible falta previa de Varane y confirmó el penalti. Muy discutido por los locales. Djuka no falló en el 18' y adelantó a los suyos. 

El tanto le dio más comodidad aún al Sporting, muy sólido en defensa hasta los minutos finales cuando Stoichkov avisó un par de veces. Sobre todo en la primera llegada con un disparó muy centrado. El descanso le vino al bien al equipo gijonés. 

Ya en la reanudación, con Marsà por Queipo y de vuelta a la línea defensiva con tres centrales, el Sporting hizo el segundo. Robó Aitor García en su propio campo, controló y desde 60 metros disparó a portería. Había visto adelantado a Luca y metió el balón dentro de la portería. Un golazo para sentenciar la permanencia, para certificar el descenso del Málaga, que en ese momento ya estaba perdiendo ante el Alavés.

Con la victoria muy encarrilada, Ramírez metió a Pedro Díaz por Nacho Martín, que tenía tarjeta amarilla. También Garitano movió su banquillo en busca de la reacción. Y Stoichkov seguía siendo la mayor amenaza del equipo vasco. Ya en el 67' volvió a entrar el VAR, esta vez para señalar un penalti a favor del Eibar. Aitor García derribó a Tejero, que estaba pisando la línea del área. En primera instancia, el colegiado había señalado falta fuera del área. Stoichkov recortó distancias en el 68'. Algo más de 20 minutos para el 90'y acto seguido Cuéllar evitó el empate tras un disparo de Aketxe. 

Ya en la recta final, con doble lateral en la banda izquierda gijonesa, el Sporting cedió muchos metros y Blanco Leschuk perdonó el empate. Segundos después volvió a adelantarse el Alavés, deshaciendo el empate que había logrado el Málaga en la segunda parte. Ahí se acabó la tensión por la permanencia, el Sporting volverá a jugar en Segunda división la próxima temporada. 

La alegría, sin embargo, no pudo ser doble. Y es que en el 90', tras un saque de esquina, Blanco Leschuk esta vez sí acertó. Cabeceó solo e igualó el partido. Ya en Cali Izquierdoz vio la segunda tarjeta amarilla y Cuéllar evitó la derrota con una buena intervención. El Sporting cumplió su objetivo de sumar y certificar la permanencia sin mirar a Málaga.