La Crónica: El Sporting se gana la calma dominando y sufriendo

El Sporting sumó una importante victoria en Can Misses para disipar a los fantasmas del descenso. El equipo rojiblanco afrontó bien el partido y se encontró con un resultado muy favorable antes del descanso después de 45 minutos de buen juego. Otero y Carrillo daban tranquilidad, el Ibiza la quitaba en la segunda parte. Cuéllar detenía un penalti y aguantaba el chaparrón que imprimían los de Alcaraz con un jugador más. Aitor García cerró el partido para sumar un triunfo que brinda tranquiliidad. 

Con un planteamiento inicial similar al utilizado ante el Granada, el Sporting salió con fiereza a Can Misses. Pero la primera fue para un Ibiza necesitado de puntos. Martín, tras un córner, exigió la mejor respuesta de Iván Cuéllar para evitar el tanto local. Una parada de reflejos que detenía el apurón pitiuso tras varios saques de esquina consecutivos. Al tercero, el extremeño cazó el balón por alto y vio una centella colombiana. Juan Otero se disfrazó del Aitor García de diciembre de 2022. 

Mismo estadio, misma zona, misma carrera, mejor definición. El cafetero condujo a la perfección, mandó al suelo a Javi Serrano con un recorte y definió mejor. Un tanto que evidenciaba un buen inicio del Sporting de Ramírez. El plan volvía a surtir efecto y los rojiblancos mandaban en el marcador y en el juego. Tenía más ocasiones el Sporting pero Otero no estaba fino a la segunda para definir una buena dejada de Jeraldino. 

El que volvería a estar atinado era Varane. El francés cuajó otra tarde de escándalo y dejó su segunda asistencia de la temporada con un pase en la frontal para que Jordan Carrillo, con el exterior, la alojara en el fondo de la portería. Ver para creer. El Sporting vencía y convencía en Ibiza. 

Tras el descanso, los poderes se tornaron. El Ibiza avanzó y el Sporting retrocedió. El equipo pitiuso se encontró con la peor acción de Cuéllar en el partido al ser incapaz de sacar un disparo de Julis que se coló sobre su pie. Fallo grave que recompensaría después. El capitán del Sporting evitó el empate del Ibiza al detener el quinto penalti de la temporada cometido por Cali Izquierdoz. Cuéllar le ganó la batalla moral a Ekain y detuvo la pena máxima. Una de cal y varias de arena. 

Pero no estaría la faena hecha. El Sporting tuvo que soportar con un jugador menos en la recta final. Diego Sánchez se fue a la calle por una entrada excesivamente dura sobre Suleiman. A diez minutos del final, el Ibiza quemó las naves y Aitor García aprovechó las cenizas. Desde su casa, con Fuzato a la desesperada buscando el empate, el onubense marcó el gol de la tranquilidad. Tres puntos que alejan definitivamente el descenso y que parecen poner punto y final a la temporada. Falta el remate final.