El Real Oviedo solo marca a balón parado desde el 17 de noviembre

En toda la temporada, son tres los goles que el cuadro asturiano ha anotado sin la ayuda de la estrategia o sin transformar un penalti

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Borja Bastón pelea por un balón
Borja Bastón intenta cazar un balón en su último partido ante el filial del Villarreal, pero el portero se anticipa.
Mié, 01/02/2023 - 19:45

Existe una percepción generalizada a la hora de sostener que el Real Oviedo tiene un problema de cara a puerta. Tanto es así, que es el equipo menos goleador de la Liga. Sin embargo, cuando los datos se analizan con más detalle, resulta difícil evitar sufrir un escalofrío.
El cuadro asturiano no anota un gol de jugada desde el 17 de noviembre. Fue en El Toralín. Borja Bastón atinaba en un mano a mano para adelantar a los visitantes, aunque la victoria se escaparía en un cruel desenlace.
Ese fue el único partido en el que Cervera consiguió que su equipo marcara un gol sin recurrir a la pizarra. En el resto de casos, los tantos llegaron desde la pena máxima o mediante una jugada de estrategia.
Siendo justos, el balón parado tiene un claro protagonismo en todos los equipos. De hecho, el 33% de los goles de la categoría se marcan gracias a ese aspecto del juego. El problema radica en que en el caso del Real Oviedo el porcentaje supera el 80%.
De hecho, con Bolo los datos ofensivos no eran mejores. En los partidos que estuvo al frente, solo se anotaron dos tantos de jugada. El primero de ellos, fue gracias a un regalo que hizo el portero del Levante. Sergi Enrich aprovechó un mal despeje para situar a su equipo en ventaja aunque, al igual que contra la Ponferradina, ese encuentro concluyó en tablas. El otro fue semanas después ante el Cartagena en el Carlos Tartiere. Borja Bastón reducía diferencias cuando había un 0-3 en el electrónico y ya se había cumplido el minuto 90.
En semejante contexto, cabe preguntarse cuál es la principal razón por la que los asturianos tienen tan malos números. Por ahora, Bastón es el autor casi del 50% de los tantos anotados. Sus números son ligeramente peores a los del año pasado. Sin embargo, la casi nula aportación de Enrich y hasta ahora Obeng ha supuesto un problema. La segunda línea tampoco ve portería.