La lectura ganadora de Abelardo: Ordenar la defensa para generar en ataque

El técnico del Sporting supo gestionar la inferioridad de su equipo para acabar llevándose el partido ante el Lugo

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Abelardo
Abelardo Fernández observa un partido de pretemporada del Sporting
Vie, 09/12/2022 - 10:25

No había tenido Abelardo que gestionar una inferioridad en esta liga todavía. La primera expulsión de la temporada dejó al Sporting de Gijón en una situación delicada. Inmerso en una racha sin victorias que parecía no tener final y empatando en casa del Lugo, el equipo rojiblanco encaraba los últimos 30 minutos de partido sin uno de sus centrales. Pablo Insua dejaba al equipo con uno menos y obligaba a una reacción por parte del banquillo. En inferioridad, Abelardo sacó su mejor lectura para terminar ganando el partido. 

El técnico reaccionó a la expulsión reordenando a su equipo. Gragera volvió a actuar como central y Djuka se quedó como único integrante del ataque. El cansancio normal del montenegrino dio paso al cambio de Jordan Carrillo. El mexicano ingresó en el partido con 20 minutos por delante y desencadenó el nuevo sistema. Juan Otero pasó a ser el nuevo delantero, con Jony y con el azteca en los costados.

Un cambio ofensivo y valiente para la situación que vivía el Sporting en el partido. "Era un cambio lógico el de Djuka. Estaba algo cansado, estábamos replegados y necesitábamos velocidad arriba. No podíamos dejar que los centrales nos metieran el balón directo tan fácil", explicó Abelardo tras el partido. 

Lo cierto es que fue un cambio eficaz. Carrillo y Otero dinamitaron el ataque rojiblanco en la jugada del gol. Y todo nace de otro ajuste táctico de Abelardo. Jordan partió desde la banda derecha. Sin embargo, el técnico rojiblanco optó por cambiar la posición de Carrillo con la de Jony. Desde la banda zurda, donde ya brilló en La Rosaleda, el mexicano empezó la jugada del gol. Esa que continuó Otero. Y esa que remachó un Zarfino que también había adelantado su posición.

"Miramos el acierto ofensivo y defensivo", justificaba el entrenador. Una lectura más que correcta y acertada de la situación que le brindó al Sporting los primeros tres puntos de los últimos meses. Sin echarse atrás a pesar de la expulsión, el equipo rojiblanco demostró la valentía de la que había pecado en otros segundos tiempos. Cuando peor venían dadas, Abelardo sacó a relucir su valentía con acierto. Un cambio para nada defensivo y del que el equipo rojiblanco sacó mucho provecho en ataque.