Nacho Méndez coge galones para cerrar el año rojiblanco

Un final de 2021 en lo alto. Nacho Méndez ha demostrado en la recta final de este año que es un jugador más a tener en cuenta por David Gallego. El centrocampista de Luanco ha disputados los últimos tres partidos desde el once titular, contando con protagonismo en la idea de juego del técnico catalán. Su función siempre ha ido variando en el desarrollo de los partidos. Desde jugar en el centro hasta caer en la banda. Nacho Méndez es el chico para todo de Gallego en la recta final de año del Sporting de Gijón. 

Empezó el año con plaza fija en el once. Disputó los dos primeros partidos de la temporada como titular, ante Burgos y Tenerife, pero se fue cayendo poco a poco para dejar paso a los que, hasta ahora, eran la apuesta de Gallego para conformar la sala de máquinas. Pedro Díaz y José Gragera brillaban durante el primer tramo de temporada, dejando las cosas muy complicadas al de Luanco. La siguiente alternativa desde el inicio le llegaría a Nacho en Cartagonova. Una muy buena primera parte a nivel personal derivó en una segunda calamitosa a nivel grupal, con el '10' inmerso en la deriva. Ese sería el primer partido de la racha. 

La mala dinámica se cortó en Ibiza y con Nacho Méndez de nuevo en el once. Sorprendía Gallego con la apuesta en detrimento de Pedro Díaz y le salía bien. Nacho despachó un partido más que correcto, generoso con el balón y con las ayudas defensivas. En la segunda parte, cuando las piernas pesaban, el técnico del Sporting lo desplazó a la banda en una demarcación en la que su brillo no es el mismo. Su sitio está en otro lado. En la banda, un jugador de sus características no luce de la misma manera que lo hace en el centro. Una posición que ha ocupado en los tres últimos partidos y en los que el Sporting acumula dos victorias y un empate. El '10' recupera galones.