Orlegi recela de los 300 millones y propone el 'naming' de El Molinón

El proyecto del Grupo Orlegi sobre la transformación de El Molinón y todo su entorno está muy avanzado para haber sido confeccionado en apenas 30 días. Esa es la sensación general de los representantes de los grupos municipales que este lunes mantuvieron una reunión con Alejandro Irarragorri, David Guerra y Fernando Sordo Madaleno. 

Es más bien un boceto muy trabajado para, después, realizar un proyecto. En general, a los grupos municipales les ha parecido seductora la propuesta arquitectónica y urbanística que el Grupo Orlegi ha presentado este lunes en el ayuntamiento de Gijón. Otro asunto, más complejo por todo lo que conlleva, es el estudio económico para financiar la transformación anunciada. Sobre este asunto no se han comunicado certezas este lunes, sino más bien intenciones. Una tarea pendiente que resulta lógica por la fase embrionaria del proyecto, supeditado al visto bueno de la Federación y, después, al de la FIFA. 

Alejandro Irarragorri, que no pudo concluir la reunión porque tenía en su agenda una conferencia de prensa en México, subrayó una serie de grandes vías de financiación. Para empezar, habló del naming, el apellido que ya acompaña a varios de los estadios más emblemáticos de España. Un tema tabú en los últimos años o, directamente, una posibilidad que en los últimos años ha sido negada por cada uno de los responsables políticos con legitimidad para autorizarlo. También habló de la explotación de los palcos vips y del resto de servicios que pueda ofrecer el estadio y su entorno. 

Este aspecto, el de la financiación, es sin duda el más difícil de todos. En el ámbito público, Orlegi cuenta en sus planes con los fondos da la RFEF, los del gobierno central destinados al Mundial 2030 y, por último, los de Gijón y Asturias. Sin embargo, esta misma tarde, los grupos municipales advirtieron de las "limitaciones" económicas del Ayuntamiento para sufragar parte de la inversión en la transformación de El Molinón. Otro momento importante fue el relativo a los 300 millones de presupuesto. Una cifra que no fue admitida, aunque tampoco desmentida, por el Grupo Orlegi.