Tras la salida de Tito Blanco y Jon Pérez Bolo... ¿Ahora qué?

Tras la derrota de anoche ante el Albacete, se esperaban decisiones de calado, especialmente, en cuanto al futuro de Jon Pérez Bolo. La figura del entrenador azul llegó muy debilitada al Carlos Belmonte por la acumulación de malos resultados, y la derrota ante el conjunto manchego terminó por abatirlo. Su futuro parecía lejos del Carlos Tartiere.

Por ello, era cuestión de horas que la dirección deportiva fuera a tomar, de manera inminente, una determinación sobre su continuidad. Y esta llegó en forma de despido. Lo que nadie esperaba era que junto a Bolo, también se le abriera la puerta al director deportivo, Tito Blanco. Sorpresivo cuando menos, el Grupo Pachuca se había cargado de cuajo a los dos máximos responsables del proyecto deportivo azul para la temporada 2022/23.

Ahora, al grupo mexicano le tocará enfrentarse a una de las decisiones de mayor calado desde que aterrizaron en Oviedo. Su primer objetivo será nombrar al nuevo director deportivo, y casi de manera paralela al entrenador. Una decisión en la que tendrá mucho peso Agustín Lleida, nombrado director general del club hace un mes y con formación y experiencia en el área deportiva. También intervendrán el presidente de la entidad, Martín Peláez, y el propietario del Grupo Pachuca, Jesús Martínez.

Mientras se toma esa decisión, el entrenador del filial, Jaime Álvarez, será quien dirija los entrenamientos del primer equipo. Junto a él estará el entrenador del División de Honor, Paco Fernández. Ambos a la espera de la llegada del nuevo técnico para después continuar con sus funciones en el club. Quien también les acompañará será Sergio Segura, el entrenador de porteros, que seguirá al frente de esta área en la primera plantilla. No así el grueso del cuerpo técnico que acompañó a Bolo, que al igual que el bilbaíno, ha sido despedido.