Una bestia albinegra para el Sporting de Gijón

"No sé si somos un equipo aspirina", explicaba Cote este mediodía, cuestionado acerca de la mala fama del Sporting de Gijón cuando se enfrenta a equipos de la parte baja de la tabla. Utilizaba el de Roces a modo de recordatorio los encuentros del curso pasado ante el Villarreal B y ante el Cartagena. Y es que en Cartagonova llegó uno de los tropiezos más controvertidos del año pasado. 

Muchos aficionados del Sporting recordarán el tanto del Cartagena en la recta final de partido que sirvió para estirar el gafe de Cartagonova. Fue una acción rápida. El Sporting no recuperó posiciones tras un córner a favor y el Cartagena galopó. La pelota le cayó tras una buena transición a Héctor Hevel que ubicó a Juan Carlos en el camino al gol para que este batiera a un Rubén Yáñez. El asistente aguó la celebración cartagenera por fuera de juego. La primera imagen televisiva y la primera línea en surgir desde el VAR deshabilitaba la decisión del árbitro y validó el gol del Cartagena. 

Sin embargo, el análisis posterior demostró el fallo del colegiado. El frame sobre el que se lanza la línea y que habilitaba al goleador no fue el correcto. Un tanto que encendió al sportinguismo y al vestuario. "Que compren otro programa", llegó a decir Nacho Méndez en zona mixta. Polémicas aparte, fue otro capítulo para el olvido en Cartagonova. 

La derrota del año pasado agrandó la leyenda negra que rodea al Sporting en sus visitas a Cartagena. Las últimas tres se han traducido en tropiezos y con malas sensaciones del conjunto gijonés. Sin ir más lejos, la derrota del curso pasado sirvió para romper una gran racha del equipo de Ramírez. Lo hizo tras un partido sin brillo del Sporting y que, a pesar de la polémica, no había hecho grandes méritos para conseguir los tres puntos. 

De sus visitas al Cartagonova, el Sporting solo ha sido capaz de ganar en la primera. Fue en la temporada 2020-2021, cuando el debut goleador de José Gragera en el fútbol profesional le dio al equipo de David Gallego la victoria. La única que ha sido capaz de celebrar el Sporting en un campo al que se le está poniendo cara de recinto maldito para el conjunto gijonés. Para quebrar males farios, la mejor medicina sería un triunfo este lunes. Los números como local del Cartagena, los peores de la categoría, dan alas a pensar que es posible. Pero en esta Segunda nunca se sabe.