27 futbolistas pueden ser demasiados

No habrá más salidas. Eso es lo que dice el club, al menos de puertas para fuera. Según explicó el director deportivo del Real Oviedo, Roberto Suárez, "si algún otro jugador quiere irse del equipo tendrá que hacérselo saber al club y, valoraremos la situación, pero no es algo que esté previsto". Así pues, teniendo en cuenta esto, el riesgo de 'overbooking' es real.

El club, tal y como anunció el propio Roberto Suárez, quiere fichar a dos jugadores que proporcionen velocidad en zona de ataque. Naturalmente, todo dependerá de las opciones que existan en un mercado en el que, normalmente, más que encontrar grandes soluciones, se quitan problemas a otros equipos. Ahora bien, si el cuadro asturiano cumple su objetivo, la cifra de jugadores en nómina sería impactante. El Oviedo, en ese caso, contaría con 25 fichas ocupadas a las que habría que sumar a Bretones y a Mángel que están en dinámica del primer equipo.

Las lesiones han sido la nota predominante de la temporada y, en este sentido, resulta lógico que el cuerpo técnico quiera cubrir sus carencias. Eso sí, ni se quiere cortar la progresión de los canteranos, ni tampoco malgastar dinero en jugadores que no gocen de minutos. Por ello, parece que existe cierta diferencia entre lo que el club planea y el cumplimiento de ambas premisas. 

Así pues, pese a lo anunciado por el club, no sería sorprendente que existiese flexibilidad en relación con un cambio de postura. Además, también existe la posibilidad de que una nueva incorporación desbloqué nuevos movimientos. Por ejemplo, Samuel Obeng casi no está contando con minutos en los últimos encuentros ligueros y, un aumento de la competencia, le condenaría a la clandestinidad. Por ello, el Real Oviedo podría estudiar una cesión si el delantero lo estima oportuno ya que, la gestión de tantos futbolistas en nómina, podría ser complicada. Así pues, algún futbolista al no disponer de minutos y, al quedar una única competición, podría desenchufarse si no entra en los planes de Cervera.

En 2018, la anterior propiedad apostó por un cambio en el modelo de fichajes tras anunciar 16 nuevas altas. De hecho, se apostó por un modelo en el que no se tuviera más de 20 fichas ocupadas en el primer equipo. El aumento de cambios durante un partido tras la pandemia justificaría el incremento de las plantillas, pero no un cambio de política.