Delirio azul: Así vivió el oviedismo un domingo para el recuerdo

A las 14:15 horas, puntuales a su cita, miles de oviedistas se agolparon en la calle Alejandro Casona para recibir con honores al autocar de la plantilla del Real Oviedo. Lo hicieron de azul, portando banderas y bufandas, tal y como se fue reivindicando a lo largo de la semana en redes sociales. La cita ante el Zaragoza así lo demandaba.

Una vez que apareció en el horizonte el autobús, se prendió la mecha. Una nebulosa azul de bengalas cubrió la atmósfera oviedista que se había creado. Cánticos, aplausos y palmadas al vehículo del equipo hacía todavía más épica la escena, antes de un partido crucial para volver al play-off de ascenso. Mejor verlo que contarlo.

🔥 Una vez más, el oviedismo ha vuelto a RUGIR

🔝 Espectacular recibimiento al autobús del #RealOviedo antes del partido ante el Zaragoza

🔵 Miles de aficionados se dieron cita en Alejandro Casona#RealOviedoRealZaragoza pic.twitter.com/CeMXmq9V9o

— Killer Asturias (@killer_asturias) May 12, 2024

Ya dentro del Carlos Tartiere, 22.685 aficionados poblaron las gradas de un estadio con aroma a partido grande. No fue la mejor entrada de la temporada, pero se aproximó a los 23.432 que hubo en el partido ante el Racing de Santander a mediados de marzo. Antes del inicio, un mosaico azul y blanco de cartulinas que erizó la piel de los menos sensibles, con Clint Eastwood como testigo de lujo desde el Fondo Norte.

Cuando Ais Reig señaló el inicio del encuentro, el estadio fue una caldera de principio a fin. Sin ser el partido más brillante de los de Carrión, no hubo tembleque al final. Todo lo contrario. La parroquia oviedista dio ese impulso en el momento más determinante, justo cuando más lo necesitaba el equipo. Fue en el minuto 86 cuando llegó el gol de Alemão, que desató un estallido que hizo temblar los cimientos del Carlos Tartiere.

"Disfrutamos de lo que vemos, se nos ponen los pelos de punta. Verlos en la plaza Pedro Miñor esperando, luego en el estadio… Esto es mérito de todos. Todo a la gente que ha venido a empujar por y para el Oviedo. La afición tiene ganas de ascender a Primera y nosotros también. Estamos de la mano de la ciudad", expresó Luis Carrión al término del partido.

La victoria permite al Real Oviedo volver a dar caza a la quinta plaza, aunque sobra decir que no hay nada hecho. Tres jornadas por delante para intentar cerrar el curso lo más arriba posible. Ahora la afición y el equipo ya fijan el siguiente objetivo: el Espanyol. Y aún siendo el partido de lunes, y con la distancia que separa Asturias de Barcelona, el oviedismo volverá a estar al lado de su equipo. Como ha hecho siempre.