El Carlos Tartiere, un fortín infranqueable: solo un estadio presenta mejores números

En una fría y lluviosa tarde en el Carlos Tartiere, el Real Oviedo se encargó de convertirlo un día más en una caldera para llevarse una nueva victoria que recuerda a alguna anterior por la forma. Otra vez más, al igual que contra el Elche o el Eibar, los azules comenzaron por debajo en el marcador y fueron capaces de darle la vuelta en una segunda parte eléctrica que deja una evidencia: puntuar en el feudo carbayón cada vez es más complicado. 

De hecho, el Carlos Tartiere ya se puede considerar un fortín casi inexpugnable: solo el Real Valladolid fue capaz de ganar y los azules acumulan 32 puntos de 45 posibles (30 de 39 se consiguieron con Carrión), unos números que le colocan como el segundo mejor local de la categoría empatado con el RCD Espanyol, tanto en puntos como en diferencia de goles (+16). 

Desde la llegada del técnico catalán han mejorado considerablemente las marcas anotadoras. 25 goles en 13 encuentros que colocan al Oviedo como el equipo más anotador en su estadio en la era Carrión. Y si por algo destacan los azules es por su capacidad de reacción. Cartagena, Eibar, Elche, Eldense, Levante… en todos empezaron perdiendo y en todos terminaron, como mínimo, puntuando.

También queda en evidencia lo que aprieta el feudo carbayón en la recta final. En todos los encuentros mencionados, el Oviedo anotó en los últimos minutos para darle la vuelta al marcador. De igual manera que lo consiguió ante el Huesca y el Leganés cuando aún no se había movido el electrónico. Un ejercicio de valentía y garra que, por ahora, da resultados. 

Y si los jugadores disfrutan sobre el campo, la afición más en la grada. En la presente campaña hay 3.000 aficionados más de media en el Tartiere, que tiene el mejor promedio de espectadores desde el regreso a la Segunda División (16.039). Y aún queda el último tramo de competición, en el que las taquillas suelen conseguir un tirón importante por las promociones que lanza el club y por la lucha por objetivos ambiciosos, en la que se espera que estén los azules. Con esta comunión grada-equipo todo será más fácil.