El "mejor mediocentro del momento" que pudo ser rojiblanco
Rodri Hernández estuvo cerca de llegar al Sporting en calidad de cedido en 2016 cuando el equipo asturiano militaba en Primera y el centrocampista estaba en el Villarreal B
Los caminos del fútbol son enrevesados. Las carreras de los futbolistas son capaces de cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Lo que parece que en un destino no llegará a ser tanto, otro club puede cambiar la perspectiva. Una idea similar ha vivido en sus carnes Rodri Hernández. El centrocampista español está triunfando en el Manchester City a las órdenes de Pep Guardiola. Un jugador que casa con el estilo de un técnico catalán que ayer le definía como "el mejor mediocentro del momento". El de Castellón estuvo cerca de recalar en el Sporting.
Era el verano de 2016 y el Sporting preparaba una nueva temporada en Primera división tras haber conseguido una permanencia agónica en la última jornada ante el Villarreal. El cuadro de Abelardo Fernández dibujaba una plantilla en la que Sergio Álvarez se situaba como el único centrocampista de referencia. El avilesino, que será próximo rival del Sporting en LaLiga Smartbank, buscaba socio y los rojiblancos rastreaban el mercado de centrocampistas. En ese horizonte, aparecía un joven futbolista de 19 años que despuntaba en Segunda B con el filial amarillo.
Rodri Hernández se quedaba a las puertas de conseguir el ascenso con el Villarreal B a Segunda división. Ese año ya había tenido la oportunidad de debutar en la élite de la mano de Marcelino García Toral. El técnico asturiano intuyó las características que también vio Abelardo en aquel futbolista de mucha altura y buen trato de balón. El Sporting sondeó su cesión aquel verano aunque finalmente no fue capaz de concretarla.
Rodri Hernández dio un paso adelante y se hizo con una plaza en aquel Villarreal. Dos años buenos en La Cerámica le llevaron al Atlético de Madrid y, de ahí, a convertirse en un jugador diferencial en el Manchester City.
La opción de aquel verano en el Sporting de Gijón fue apostar por un futbolista totalmente opuesto. Xavi Torres aterrizaba en Mareo para repoblar el centro del campo. No se apostó por una operación similar a la de Rodri en verano aunque sí se hizo en invierno. Mikel Vesga, un joven talento de Lezama, llegó en calidad de cedido por el Athletic de Bilbao y rindió a muy buen nivel en su mitad de año en Asturias a pesar de que el equipo acabó descendiendo a Segunda división.