El Real Oviedo busca romper el gafe contra los grandes a domicilio
Los azules que en el Carlos Tartiere compiten contra cualquiera, atraviesan una crisis profunda de visitante ante equipos de la zona alta
La Liga
El Real Oviedo afronta desde este domingo las últimas diez jornadas ligueras. Los azules tendrán por delante un calendario exigente, si tenemos en cuenta que de esos diez encuentros, cuatro serán ante equipos que optan al ascenso. Granada, Eibar, Levante y Las Palmas pondrán a prueba la reacción de los azules, tras la victoria de esta pasada jornada ante el Leganés en Butarque.
A favor de los azules cuenta el bagaje cosechado en la primera vuelta frente a los equipos de arriba. Casualmente, su rendimiento frente a los mejores es positivo, a pesar de la irregularidad mostrada por el cuadro carbayón a lo largo del campeonato. De los ocho partidos disputados hasta el momento frente a los seis clasificados, los azules tan solo han perdido tres.
De hecho, al rival de este domingo ya lo han ganado dos veces. La primera de ellas, desequilibrando la balanza en los minutos finales con un golazo de Sergi Enrich, pese a llevar jugando una hora con un jugador menos. La segunda, un jueves de Copa del Rey con remate de cabeza de Luengo que permitió a los azules enfrentarse en la siguiente ronda a un todopoderoso Atlético de Madrid.
Sin embargo, esta tendencia tan positiva no se mantiene cuando al Real Oviedo le corresponde jugar lejos de su estadio. Los azules han perdido en todos los estadios de equipos que actualmente se juegan el 'play off'. De hecho, no han conseguido sumar ni un solo punto de 9 posibles. Ahora bien, a excepción del encuentro del Carlos Belmonte que fue el último de Jon Pérez Bolo, en el resto de encuentros la imagen fue positiva. En Ipurúa el equipo compitió y en Mendizorroza se escapó un empate en el último con tras un penalti que solo vio el árbitro.
Ahora bien, si se presta atención a los datos del año pasado, los números son muy alarmantes. Los de Ziganda solo perdieron 8 encuentros en toda la Liga, pero seis de ellos fueron ante los seis mejores equipos clasificados. De hecho, las otras dos derrotas fueron en casa. Un dato que cuanto es menos sorprendente.
