El Real Oviedo repite la fórmula

Puntería arriba y solidez atrás. Esta es la máxima a la que aspira cualquier equipo de fútbol que quiera lograr grandes objetivos. Una fórmula nada sencilla de alcanzar, pero que es signo inequívoco de éxitos. Y si no que se lo digan al Real Oviedo en estas dos últimas semanas de competición.

Los azules han conseguido en estas dos jornadas dejar la portería a cero. Primero lo hizo ante el Huesca (0-2) y después, este pasado domingo, ante el Zaragoza (1-0) en el Carlos Tartiere. En este último encuentro, el equipo de Luis Carrión apenas recibió cuatro disparos entre palos, uno más que los que el conjunto oscense les había hecho una semana antes.

Este buen rendimiento atrás se debe al gran momento que viven sus dos centrales, Dani Calvo y Oier Luengo, así como el portero azul, Leo Román. Aunque siempre se recalca que el rédito defensivo se alcanza de manera coral, la temporada de estos tres futbolistas está siendo soberbia. En el caso del portero ibicenco, con intervenciones de mucho mérito que han salvado los muebles de los azules en no pocas ocasiones.

La mayor racha de partidos sin encajar de los carbayones fue en octubre, cuando mantuvieron su portería a cero durante seis jornadas consecutivas, lo cual les sirvió para coger impulso en clasificación. Sin embargo, a partir del empate sin goles en Zaragoza allá por el 6 de noviembre, el Real Oviedo entró en dinámica de intercambio de golpes con sus rivales, en la mayoría de casos en beneficio del conjunto oviedista.

Desde aquel partido en La Romareda, y antes de visitar El Alcoraz, los carbayones solo han evitado encajar goles en cuatro partidos: ante el Espanyol (2-0), Leganés (1-0), Burgos (5-0) y Elche (0-2). Ahora, en el tramo más decisivo del campeonato, el Oviedo tratará de repetir la fórmula este próximo lunes en Barcelona. Andorra y Eibar son los otros dos equipos que pondrán a prueba la retaguardia azul.