El Sporting confirma a Lander Olaetxea, el soldado de Rubén Albés

El tercero también está. El Sporting de Gijón ha hecho oficial esta tarde la llegada de Lander Olaetxea, centrocampista vasco que reforzará la medular del conjunto gijonés. Una petición expresa de Rubén Albés para suplir el vacío que deja Christian Rivera en la zona del pivote y que buscará rendir en su segunda etapa junto al entrenador vigués. Ambos rindieron a gran nivel en el Albacete para llevar a los manchegos al play off de ascenso a Primera división. 

Lander Olaetxea Ibaibarriaga (Abadiño, 1993) se enfrentará en Gijón al reto de mayor nivel de su carrera. Tras acumular partidos en Segunda con el Logroñés, Amorebieta y Albacete, el centrocampista vasco llega a Asturias para aspirar a los mayores retos. Por primera vez, afrontará una temporada con el objetivo de pelear por la zona alta de la tabla. Un jugador al que Rubén Albés sabe sacar el mayor rendimiento. En el Albacete fue un fijo para él, un habitual en los onces iniciales manchegos tanto en el primer año como en el segundo. 

El vasco firmó su nuevo contrato para la próxima temporada, con opción a ampliar un curso más en función de objetivos. Era el punto en el que la negociación se había detenido, el futbolista buscaba una apuesta más duradera en el tiempo como la que le ofrecía el Burgos. También se interesó por él clubes como el Deportivo de la Coruña o el Málaga. Entre la mejora de la oferta, el proyecto rojiblanco y la presencia de Rubén Albés. el Sporting se llevó el gato al agua. 

"Es un chico muy sencillo, humilde y trabajador. Para el perfil del Sporting, le viene bien. Puede jugar en cualquier posición. Albés quiere que todo el mundo brinde emoción al fútbol y Olaetxea le conoce de sobra, encaja perfectamente con lo que está buscando", decía este mediodía Álex Pérez en Radio MARCA Asturias. El excentral del Sporting coincidió en Lugo con Rubén Albés y con Lander Olaetxea en el Logroñés.

Para él, la figura de Olaetxea encaja dentro de las pretensiones de un entrenador que vive por y para el fútbol. "Es un líder, mi tiempo con él me encantó su personalidad (...) Es el tipo de entrenador que gusta en Gijón, él habla de emocionar con el fútbol y eso casa con El Molinón. Cada partido envejece, el hombre lo vive demasiado. Si tenemos un mal partido, al día siguiente se le nota que la noche ha sido dura por no poder dormir", dijo sobre el Albés.