El Sporting más extremista: De líder a colista en cuestión de minutos

El reparto de la clasificación del Sporting por tramos de encuentro es bestial: De ser líder hasta el minuto 75 a tocar fondo en los últimos 15 minutos de partido

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Borja Jiménez, en el banquillo de El Molinón durante el partido ante Las Palmas
Lun, 10/11/2025 - 21:03

"No creo en nada de esas cosas. Se comentó al inicio, pero ya ni me acordaba”. La reflexión de Borja Jiménez al término del partido ante el Mirandés sobre el apagón generalizado del Sporting de Gijón en los minutos finales buscaba restarle importancia al tema. Quizá era bueno focalizar más en esa cuestión. No es algo baladí. El Sporting se desangra en los últimos 15 minutos de partido. Tanto que, hasta llegar al último cuarto de hora, los rojiblancos tocarían el cielo en la Segunda división. 

Los datos reflejan lo bien que se le da al Sporting entrar en los partidos y lo abatido que los termina. La clasificación parcial de la categoría sitúa al equipo gijonés como el mejor equipo de la categoría en los primeros 75 minutos de juego. Hasta ese momento, el Sporting ha conseguido un total de 26 puntos. Siete menos de los que atesora en la vida real. Una situación que le daría para liderar la categoría sobre Racing, Las Palmas, Deportivo de la Coruña, Real Sociedad B y Leganés. Pero llega el minuto 76 y los plomos se bajan. 

Del cielo al infierno. Si solo se tuvieran en cuenta los minutos finales de partido, el Sporting daría con sus huesos en Primera RFEF. Los rojiblancos son el equipo que menos botín han logrado recaudar en el último cuarto de hora de encuentro, contando también el tiempo añadido. Siete puntos tendría el casillero rojiblanco si los partidos se centraran en ese espacio de tiempo. Algo que serviría al Sporting para cerrar la clasificación por la parte de abajo, siendo colista y teniendo la permanencia a seis puntos. La cara y la cruz en una corta separación de tiempo. 

A Borja Jiménez dice no preocuparle esta situación. Al menos, así lo transmite en sus intervenciones. Pero la realidad es que el Sporting de Gijón está adoleciendo la falta de recursos a lo largo del partido. El técnico abulense exprimió los mimbres de su plantilla en sus primeros encuentros, consiguiendo resultados y afianzando su idea. Las lesiones y las sanciones hicieron aparecer las grietas del vestuario. La unidad B sigue sin estar a la altura y al Sporting le duelen los minutos finales. Tanto como para pasar de un extremo a otro. 

Un mal que tampoco es nuevo para el Sporting. Le pasó a Rubén Albés, lo pagó Garitano y lo está viviendo Borja Jiménez. El paso de los minutos está siendo el peor castigo para un equipo que compite bien en los inicios de encuentro. Prueba de ello es que el Sporting ha empezado ganando todos los partidos desde la llegada del entrenador abulense, a excepción del duelo sin goles ante Las Palmas. Siempre golpeó antes el equipo gijonés. Pero el Mirandés le respondió con fuerza. Otra vez en los minutos finales. Un mal endémico al que Borja Jiménez deberá hacer frente.