La operación que podría desbloquear la salida de Obeng

Los caminos de Samu Obeng y la Sociedad Deportiva Huesca parecen destinados a encontrarse. El conjunto oscense nunca ha escondido su interés en volver a contar con el ghanés, después de su gran rendimiento la pasada temporada. El delantero, más prudente, no hizo público su intención de repetir la experiencia en El Alcoraz, aunque sí reconoció haberse sentido contento a las órdenes de Ziganda, principal valedor de su incorporación durante el mercado de fichajes.

Obeng sabe que el Real Oviedo no cuenta con él para la próxima temporada, si bien su salida no fue bien encajada por el club azul, que sí contaba con él para la segunda parte del campeonato. Ahora, tras este fructífero paso por El Alcoraz, las partes parecen encauzadas a entenderse. Sin embargo, hay un motivo que de momento lo frena: el económico. 

El ghanés tiene contrato con el Real Oviedo para la próxima temporada, y aunque desde la entidad azul tienen descartada su continuidad, no quieren que su salida no venga acompañada de una contraprestación. Con una cláusula de cinco millones de euros, en el club azul son conscientes de que es una cantidad difícilmente asumible, aunque si estarían dispuestos a negociar por una cuantía menor.

Así las cosas, ahora el Huesca ya está en condiciones de sentarse a negociar con los azules. Y todo después de que hayan cerrado una de las operaciones que les permitirá lucir más músculo económico: el traspaso de Sandro a Las Palmas. El club oscense ha percibido por su venta un millón de euros, después de que el conjunto canario haya ejecutado la opción de compra que tenía por el delantero insular, cedido esta pasada campaña.

Esta operación podría desbloquear la salida de Obeng dirección a El Alcoraz, si bien el ghanés es una de las prioridades del equipo de José Ángel Ziganda. El africano, autor de cinco goles durante la segunda vuelta, se convirtió en el fichaje de invierno más goleador del campeonato. Sus buenos números en Huesca invitan a los azulgranas a hacer un esfuerzo por el atacante y así forzar su incorporación. Esta vez de manera definitiva.