Las claves de un apagón: Malas elecciones, la fatiga y una dinámica que se repite
El Sporting se desconectó en ataque tras el buen inicio y el Albacete dominó a los de Albés más que ningún otro equipo este curso
Desconectado del partido tras prácticamente hacer los deberes en el comienzo. La tarde del Sporting de Gijón en el Carlos Belmonte fue una montaña rusa de sensaciones. De la euforia inicial al pesimismo colectivo hasta llegar a un nuevo éxtasis que dio paso a otro nuevo golpe. La afición rojiblanca, que aguantó estoicamente el chaparrón en la grada del estadio manchego, vivió un partido de altibajos. También dentro del campo se vivieron todos los estados. De los malos debe aprender el Sporting.
No supo gestionar el Sporting su ventaja. Por segunda vez en la temporada, ponerse por delante no fue sinónimo de victoria para los de Albés. Le pasó en Tenerife, aunque la renta era de solo un gol. En Albacete fue más sangrante todavía. Con dos tantos de ventaja, el equipo de Albés empezó a jugar con el marcador cuando restaban más de 75 minutos por disputarse. Un paso atrás que le pasó factura a un equipo que acabó fundido sobre el terreno de juego.
Ayer no ayudaron los cambios. Al igual que en otras ocasiones la segunda unidad le había dado aire fresco al Sporting, la elección de los cambios en el Carlos Belmonte empeoró a los rojiblancos. La fatiga entró en juego, en especial en el centro del campo. La única zona del campo en la que terminaron el partido los mismos jugadores que empezaron. Olaetxea, Gelabert y Nacho Méndez completaron los 100 minutos que se jugaron en Albacete. Los tres acabaron fundidos. En el caso del '10', es el único jugador de la plantilla que ha completado los últimos cinco partidos. Sin descanso. Se entiende el cansancio.
El resto de modificaciones de Albés se movieron entre el ataque y la defensa. Los cuatro partidos de Nikola Maras con la camiseta del Sporting de Gijón han tenido un denominador común. Siempre se ha ido al banquillo en la franja de la hora de juego. Ayer volvió a ocurrir con el cambio de Róber Pier. Maras dejó su sitio a un central que no tuvo su tarde. Aparece en la foto del tercer gol de forma hiriente y no estuvo cómodo sobre el terreno de juego. El cambio del central serbio es una dinámica habitual en este inicio de temporada.
Una sustitución que no mejoró al equipo. Ninguna de las cinco que entraron al césped consiguieron hacerlo. El Sporting se parapetó con el paso de los minutos ante el empuje del Albacete, que sometió a los rojiblancos más que nadie esta temporada. Los manchegos terminaron el partido con 25 remates, 12 de ellos a puerta. Nadie, ni tan siquiera el Racing de Santander, había obligado a defender tanto al Sporting. Muestra del rumbo de la segunda parte fue que los manchegos realizaron 19 de los intentos por tres del Sporting. Se amedrentó el equipo de Albés contra su portería y terminó pagándolo con un final de partido que, cierto es, pudo salir cara. Pero el cúmulo de errores no lo iba a poner fácil.