Las líneas maestras de Bolo
Los amistosos ante el Racing de Ferrol y el Éibar descifran los planes del técnico bilbaíno: presión alta y juego por banda
Es difícil sacar conclusiones en los primeros partidos de pretemporada. En estos ensayos no prima el resultado inmediato, sino el propósito a medio plazo. Y durante los dos amistosos disputados hasta el momento ya se intuyen cuales serán las líneas maestras del nuevo Oviedo de Jon Pérez Bolo.
El bilbaíno está apostando por una presión alta de sus hombres de ataque. Ni el Racing de Ferrol el miércoles, ni este sábado el Éibar, han tenido una salida de balón cómoda en muchas fases del partido, si bien esta estrategia también conlleva mucho desgaste físico. El Oviedo está demostrando ser, por momentos, un equipo pegajoso que obliga a su rival, en muchos casos, a optar por el juego largo. De hecho, la ocasión más clara en el partido de hoy ante el Éibar fue un mano a mano de Viti fruto de esa presión. Jugadores físicos como Obeng, Jirka o el propio Viti tendrán, gracias a su velocidad, mucha relevancia en este acoso al rival.
Cuando el Oviedo roba el balón, no especula. Su misión es clara: llegar en pocos pases al área rival. Por lo visto hasta el momento, Bolo apuesta por un juego muy vertical, especialmente por las bandas, con el propósito de colgar balones al área, donde esperan los rematadores. Un método que ya aplicó en pasadas temporadas con la Ponferradina. Al bilbaíno le gustan los jugadores rápidos en los costados y eso se ha podido ver en estos dos primeros ensayos, donde han tenido mucha incidencia.
No se entiende el juego por banda sin la aportación de los laterales. En ese sentido, Bolo incide mucho desde el banquillo en que los laterales acompañen en los desdobles a los extremos. Son los casos de Miguelón por la derecha, y Pomares en la izquierda. "Estoy muy contento con ellos. Todavía falta Daniel, que nos va a ayudar. Pero de momento, están cogiendo lo que les vamos a pedir", explicó este mediodía tras el partido. Durante ambos encuentros han sido constantes sus cabalgadas en ambas bandas para aportar una mayor superioridad en los costados.
A este Oviedo aún le faltan piezas importantes por encajar. Son los casos de Bastón, Luismi, Costas, Tarín, Borja Sánchez, Sergi Enrich, Marcelo Flores o Alonso Aceves. De momento los dos partidos amistosos terminaron con cero goles en la portería rival. Aunque también en la propia. Esto se debe a un buen repliegue por parte de los azules, una vez que el rival ataca. El Oviedo junta líneas y se muestra sólido tapando huecos, evitando así las embestidas rivales. Así todo, la pizarra del bilbaíno se reduce en un bloque sólido en defensa y rápido en ataque.