Mucho con muy poco: Una lección para la columna vertebral del Sporting

La 'Unidad B' del conjunto rojiblanco anotó dos goles ante el Mirandés demostrando una eficacia que le faltó a la entidad asturiana en el empate ante el Andorra

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Amadou
Amadou celebra su primer gol con el Sporting ante el Mirandés
Jue, 04/12/2025 - 21:40

La Copa del Rey le dio un respiro a Borja Jiménez. Pese a que el Sporting tenía claro desde un inicio que sus esfuerzos iban a estar enfocados en el partido liguero del sábado, una alegría no le venía mal al conjunto rojiblanco. Además, la victoria ante el Mirandés sirvió para que se fogueasen futbolistas que no están tan acostumbrados a contar con minutos en competición liguera. Más allá de actuaciones individuales, una de las noticias más positivas fue la eficacia rojiblanca de cara a puerta. Una lección que le dio la 'Unidad B' a la primera línea del Sporting.

Mucho con muy poco. Así se puede definir el asalto que hizo el Sporting al Mirandés en Mendizorroza. La 'Unidad B' rojiblanca no necesitó someter demasiado a los de Jesús Galván para decantar una eliminatoria que se sentenció antes del minuto 20 de la primera parte. Los de Borja Jiménez se adelantaron en el marcador en su segundo disparo a puerta, y vieron aumentada la ventaja en el tercer intento. Dos tantos que, además, estrenaron a Amadou Coundoul y Manu Rodríguez como goleadores con el primer equipo.

Ocho disparos totales realizó la patrulla rojiblanca que recondujo al Sporting hacia la senda de la victoria. Le sobraron varios de esos intentos al conjunto asturiano para adelantarse en el marcador. Con tan solo tres disparos, los de Borja Jiménez ya habían anotado los dos goles que le dieron el pase a la próxima ronda. Una eficacia que se echaba de menos en la entidad asturiana.

Nada que ver con lo vivido el pasado fin de semana. Pocas veces se vio un asedio ofensivo tan insistente como el que llevó a cabo el Sporting ante el Andorra en El Molinón. Sin embargo, los de Borja Jiménez lo hicieron en vano. Hasta 22 disparos totales erró el conjunto rojiblanco para que a la 23, y de penalti, subiese un tanto local al marcador. En Vitoria, al Sporting le bastó con 21 intentos menos para abrir la lata.

Punto final a la fortuna. Con los goles de Amadou Matar y Manu Rodríguez, el Sporting dice adiós a su dependencia sobre los lanzamientos de penalti. Las últimas tres dianas del conjunto gijonés se habían producido desde los once metros. La entidad asturiana no anotaba un tanto a través de otra fórmula desde el gol de Juan Otero ante el Zaragoza. Una diana que también tuvo su origen en una jugada a balón parado, por lo que para encontrar un tanto rojiblanco fruto de una jugada colectiva había que remontarse hasta la victoria a domicilio contra el Valladolid. En Vitoria, la 'Unidad B' no solo cumplió, sino que asentó las bases a explotar por la primera línea del Sporting.