Ovi Ejaria se asoma ante su gran oportunidad
La sanción de Cazorla abre la puerta a un jugador que ha ido creciendo en minutos y cuyo perfil puede aportar conducción y creatividad por dentro
La Liga
Ovie Ejaria vuelve a asomarse como una carta interesante para Luis Carrión en un momento delicado de la temporada. La expulsión de Santi Cazorla ante el Mallorca deja un hueco evidente en la mediapunta, un lugar donde el Real Oviedo pierde pausa, criterio y último pase. Y aunque no existe un perfil comparable al del asturiano, el inglés sí aporta algo que el equipo necesitaba y que demuestran sus datos: verticalidad con balón, capacidad para recibir por dentro y cierta habilidad para romper líneas.
En lo que va de Liga, Ejaria ha participado en 7 partidos, acumulando 177 minutos, dos titularidades y un rol claramente secundario. Pero sus cifras, pese a lo limitado del volumen, ofrecen matices que explican por qué Carrión podría recurrir a él ahora. Suma 94 pases totales, con 82 aciertos (un notable 87,23% de precisión), y la mayoría en combinación corta, donde mejor se siente. No es un jugador de riesgo exagerado en la entrega -solo un pase en profundidad-, pero sí tiende a avanzar metros en conducción y a fijar rivales en zonas intermedias.
En el aspecto defensivo, Ejaria también muestra datos interesantes: 7 recuperaciones, 3 entradas ganadas y 17 duelos ganados, números que reflejan que, pese a su estilo técnico, no rehúye el trabajo. Es cierto que también pierde balones (22 en total), pero esto responde a un perfil más creativo, obligado a intentar giros, recepciones entre líneas y contactos en zonas congestionadas. Con espacios, el inglés libera su mejor versión.
Sus cifras ofensivas todavía están por llegar: ningún gol, dos remates, uno de ellos entre los tres palos, y ninguna asistencia. Sin embargo, sus minutos ante el Atlético y el Mallorca mostraron una mejoría evidente: se ofreció, ganó metros en conducción y dio continuidad a las jugadas. El cuerpo técnico ve dentro de él un jugador capaz de romper contextos estáticos, algo valioso ante rivales replegados.
La pregunta ahora es clara: ¿Puede Ejaria ocupar parte del vacío que deja Cazorla? No replicará su lectura, ni su capacidad para girar partidos con un toque, pero sí puede aportar fluidez, desequilibrio puntual y piernas para estirar al equipo. Su perfil mixto encaja especialmente bien si el Oviedo quiere atacar más por dentro y liberar a Viñas o Hassan en los costados.
Más allá de un debate táctico, la realidad es que el Real Oviedo necesita sumar recursos en un momento en el que las bajas (Cazorla y Viñas sancionados) obligan a abrir el abanico. Carrión siempre ha mostrado confianza en Ejaria cuando ha estado disponible. Ahora, el contexto le coloca de nuevo en la línea de salida.