Remar para morir en la orilla: Al Alimerka Oviedo se le resiste Obradoiro

No pudo ser. El Alimerka Oviedo sumó su cuarta derrota del curso ante Monbus Odradoiro (75-79) en un encuentro muy disputado en el Palacio de los Deportes ante 4.736 espectadores. Los gallegos llevaron el peso del partido en todo momento y en los minutos finales, cuando los ovetenses más apretaron, sacaron a relucir sus mejores argumentos para que la victoria no se les escapara.

Monbus Obradoiro arrancó como un vendaval. Un parcial de 0-10 ya era una muestra de las intenciones del conjunto gallego, con Galán y Dos Anjos haciendo daño a los ovetenses. Después de un tiempo muerto, el Alimerka Oviedo frenó la sangría. Los carbayones empezaron a encontrar el aro rival gracias al acierto de Raúl Lobaco y Cosialls, sin embargo, los de Epi seguían a lo suyo en el aro rival. Al final del primer cuarto, ventaja visitante: 20-27.

En el segundo período, el Alimerka Oviedo empezó a ajustar en defensa, pero le faltó más precisión en ataque. Los carbayones lograron dejar a Obradoiro en 13 puntos, lo que abría las puertas a cambiar el destino del partido. Parham y Townes fueron de lo más productivo en este período, consiguiendo dejar el tanteador en tres puntos de desventaja al final de la primera parte (37-40).

Con un tanteador muy igualado en los primeros compases del tercer cuarto, Monbus Obradoiro pegó el estirón de la mano de Westermann (44-53) mediado el período. Cuando parecía que los de Epi escapaban, el Alimerka Oviedo empezó a reducir la diferencia, apoyados en el acierto de Parham. No así en el de Hermanson, al que el aro le escupió los siete triples que lanzó en todo el encuentro. Todo estaba por decidir en el último cuarto (57-58).

Y aquí pudo pasar cualquier cosa. Obradoiro tuvo su momento para despegar, pero los de Javi Rodríguez lograron frenar el ímpetu con buenas defensas. Los carbayones necesitaban ese arreón en ataque para remontar que finalmente no llegó. Sí llegaron las imprecisiones y algunos errores difíciles de explicar. Sin lucidez en el aro rival, la victoria se fue para Santiago de Compostela, que tuvo más desparpajo y cabeza fría en los instantes más determinantes (75-79).

En clave individual, destacar el papel de Kravic, con nueve puntos y 16 de valoración, y Westarmann, máximo anotador del conjunto gallego con 12 puntos. En el bando ovetense, el más valorado fue Townes, con 13 puntos y 17 de valoración, seguido por Parham, que logró 17 puntos (máximo anotador del partido) y 14 de valoración. Estadísticas del partido.