Sin un dueño claro y con acento rojiblanco: La posición más inestable del Eibar

El Sporting quiere evitar males del pasado. La derrota del conjunto rojiblanco en Mendizorroza rememoró fantasmas del pasado que los de Borja Jiménez quieren ahuyentar. Para ello, el remedio es sencillo. La práctica no tanto. El Sporting tiene que reencontrarse con la victoria, y tendrá la oportunidad de hacerlo en El Molinón, donde el técnico abulense no conoce la derrota como local. En frente, un Eibar que aterriza en Asturias con dos viejos conocidos del municipal gijonés.

"Un rival difícil". Así definía Borja Jiménez en la previa al Eibar. El club armero, al igual que el Sporting, arrancó con buen pie la presente campaña, pero se desinfló con el paso de las jornadas tras encadenar seis jornadas consecutivas sin ganar. Los de Beñat San José pusieron fin a la mala racha en la última fecha. A pesar de la dinámica, el técnico rojiblanco no se fía de su próximo rival: "Tiene jugadores de talento de 3/4, otros con mucha experiencia, experimentados atrás, dos puntas que eso siempre dificulta a la defensa rival". Entre el segundo grupo de futbolistas que remarca Borja Jiménez, se encuentran dos con pasado sportinguista.

Dos viejos conocidos con un paso muy diferente por el Sporting. Sergio Álvarez y Lander Olaetxea son los dos futbolistas armeros con pasado rojiblanco. El avilesino se formó en la cantera gijonesa y debutó como profesional en el primer equipo de la entidad asturiana, siendo un actor fundamental en el Sporting de Abelardo Fernández que logró el ascenso a Primera División, y la posterior permanencia. Tras ello, el asturiano puso rumbo a Ipurúa, hace ya ocho temporadas. Más reciente es la estancia de Olaetxea en el Sporting. El vasco aterrizó en Gijón en el verano de 2024 como petición de Rubén Albés, y fue indiscutible tanto para el gallego como para Asier Garitano. Sin embargo, su participación en el Sporting se limitó a una temporada. Un pasado sportinguista que no es lo único que comparten el '6' y el '14' del Eibar.

El doble pivote, la posición más inestable del Eibar. La llegada de Lander Olaetxea y la permanencia de Sergio Álvarez, por quién estuvo interesado el Sporting el pasado verano, contribuyeron al overbooking de una posición que no acaba de definirse en los planes de Beñat San José. La del vasco no fue la única incorporación del conjunto armero en el último mercado estival para dicha posición. También aterrizó en Ipurúa Aleix Garrido, sumándose a una competencia a la que ya estaba apuntado Peru Nolaskoain. Cuatro nombres para tan solo dos huecos en el once.

Hasta cinco combinaciones ha probado Beñat San José. Todas las posibles, salvo la compuesta por Olaetxea y Sergio Álvarez, quienes tan solo han coincidido 45 minutos sobre el césped, todos ellos con el vasco partiendo desde el banquillo. Aleix Garrido es el que más veces se ha ganado la confianza del entrenador armero, con casi mil minutos a sus espaldas. "Peru Nolaskoain está en buena progresión, pero no va a poder ser de la partida", confirmaba el extécnico de Atlas. Con el guipuzcoano descartado como titular, Aleix Garrido busca en Olaetxea y Sergio Álvarez un nuevo acompañante.

El de Sergio Álvarez, un regreso más especial de lo normal. El mediocentro, que ya ha visitado El Molinón como rival en cuatro ocasiones, se reencuentra con el conjunto rojiblanco tras estar más cerca que nunca de emprender su segunda etapa en el Sporting. El canterano asturiano fue uno de los objetivos de la dirección deportiva para el mediocampo, aunque las exigencias económicas del Eibar y la confianza del conjunto armero en el avilesino impidieron su regreso. Meses después, tanto Sergio Álvarez como Lander Olaetxea vuelven a Gijón, aunque esta vez no lo harán vestidos de rojiblanco.