Un partido ya catalogado como 'final': Así lo afronta el vestuario del Oviedo

El Real Oviedo regresó al trabajo este martes con todas las miradas puestas en su próximo rival, el Elche, en lo que será un partido con mucho más que tres puntos en juego. A falta de 12 jornadas para el final, cualquier punto en juego será vital, pero el duelo directo ante el conjunto ilicitano se antoja clave para revertir la dinámica negativa y para volver a acercarse a esos puestos que marcan el ascenso directo. Así lo ve también uno de los pesos pesados del vestuario como lo es David Costas, que catalogó el encuentro como una 'final'. 

El central gallego aseguró esta mañana en rueda de prensa que "quiero vivirlo como si fuese una final" y recalcó la importancia de conseguir la victoria ante el equipo de Eder Sarabia. "Aunque no sea un partido definitivo, es súper importante y sí puede marcar lo que el equipo quiera pelear de aquí a final de temporada. A nivel psicológico nos vendría bien romper esa mala racha y ganar a un rival directo”, aseguró. Actualmente, el Elche es tercero con 53 puntos, los mismos que el Levante (segundo) y Racing de Santander (cuarto), y tres por encima del Oviedo, que además tiene muy complicado igualar a los ilicitanos en el enfrentamiento directo. 

En la ida, el conjunto carbayón sufrió la derrota más abultada de la temporada. Un doloroso 4-0 que da al Elche una importante renta para mantener el golaveraje particular a final de temporada, por lo que en caso de victoria del Oviedo, lo más probable es que los azules no logren superarles en esta jornada. Lo que sí sería un duro golpe sería sufrir una nueva derrota, tanto en términos clasificatorios (se quedarían a tres partidos de poder superar a los ilicitanos) como en psicológicos, pues sería la tercera derrota consecutiva para el combinado de Calleja. Además, la distancia respecto a los perseguidores fuera del play off seguiría reduciéndose. 

Un buen resultado también ayudaría a disipar las dudas en la grada, que no está del todo satisfecha con el juego del equipo, pero David Costas trató de restarle importancia y se mostró optimista. "Es normal que haya dudas, sobre todo en la gente. Venimos de dos derrotas seguidas, pero el vestuario está tranquilo y confiamos en nosotros, en hacer un buen partido el viernes. Es muy importante para no desengancharnos, es un rival directo y lo tenemos en nuestra mano. En nuestra casa y con nuestra gente vamos a intentar ir a por ellos", argumentó. 

El partido será muy complejo, ya no solo por el nivel de plantilla del Elche, que es muy alto, sino por su forma de jugar. Fieles a la idea de su técnico, Eder Sarabia, son el conjunto de Segunda con más posesión de la categoría, con una media superior al 60% de balón por encuentro. Por ello, contar con el apoyo del Carlos Tartiere será vital para que el Oviedo pueda aguantar entero los momentos más difíciles del partido. Así lo ve también el propio Costas. "Para mí la gente es clave. El año pasado se notó muchísimo a final de temporada. Durante la semana la gente tenía esa energía, te contagiaba y el jugador salía con otra vibra. Te sientes en deuda con ellos, el otro día estábamos pasando frío nosotros, no me quiero imaginar la gente de la grada”.