Un pasado que convence y un presente que lo ratifica

Las matemáticas no engañan. El Real Oviedo ha conseguido, este pasado fin de semana, la permanencia un año más en Segunda División. Un objetivo que no entraba en los planes del conjunto carbayón a comienzos de temporada, si bien el final de la campaña pasada invitaba a pelear por cotas mayores este curso. Sin embargo, el año se fue complicando para los azules y la salvación empezó a presentarse como el único reto que tenían por delante los oviedistas.

Una vez alcanzada esa ansiada permanencia, el Real Oviedo ya empieza a pensar en la próxima temporada. La dirección del club carbayón quiere renovar las ilusiones del oviedismo, y para ello sabe que el primer paso es decidir quién dirigirá el banquillo el próximo año. Sobre la mesa un único nombre: Álvaro Cervera. El guineano se hizo cargo del equipo en puestos de descenso y, salvo algún bache puntual de resultados, ha conseguido enderezar el rumbo e incluso hacer soñar, por momentos, por cotas más altas.

Al guineano no solo lo avalan sus números al frente del banquillo del Real Oviedo. También su historial anterior a su llegada. Especialmente, el más reciente. El de Santa Isabel ya sabe lo que es comenzar un proyecto empezado e ir, paulatinamente, dándole su toque personal. Hasta el punto de convertir las ilusiones en éxitos, como el que consiguió con el Cádiz en 2020, nada menos que el ascenso a Primera División. No fue un camino fácil, todo lo contrario. Cervera cogió al equipo en 2016 en Segunda B, y cuatro años más tarde consiguió el ascenso a la élite del fútbol español, a lo que hay que sumar una permanencia.

No en vano, esta muesca en el revólver es uno de los aspectos que más convence a la dirección carbayona para colocarle como el mejor candidato a ocupar el banquillo el año que viene. Hasta el momento, ninguno de los otros siete entrenadores que dirigieron al conjunto carbayón desde su regreso a Segunda División han alcanzado tal hito anteriormente. Tampoco el resto de 21 entrenadores que actualmente están al frente de cualquier otro equipo de Segunda División.

Una experiencia que Cervera pondría el servicio del club azul la próxima temporada si finalmente las partes se entienden, una misión a priori muy factible. "Lo he dicho ya, me he reunido varias veces y he expuesto lo que pienso. Solo queda sentarse y ponerse de acuerdo, poco tengo que hacer. Estoy bien aquí. Y ahora tenemos que hablar del tipo de la plantilla, cuál es el objetivo, como se quiere conseguir...", expresó Cervera tras el encuentro del domingo ante la Ponferradina.