Un poco de tacto con los canteranos

Los canteranos del Sporting no han estado al nivel que sí tuvieron la pasada temporada o al inicio de esta misma. Por eso, y dada la mala racha de resultados, Babin ha pedido paciencia y comprensión para ellos. 

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MAREO
La plantilla del Sporting, en Mareo.
Mar, 04/01/2022 - 18:18

Como el día y la noche, poco se parece este Sporting de Gijón al que desea David Gallego. Su equipo ha pasado de ser un cuadro sólido, bien armado y con mordiente arriba a un conjunto al que hacerle gol es tarea sencilla. Cuatro veces se ha quedado imbatida la portería de Diego Mariño en 22 intentos. En el otro área, el rendimiento también han disminuido, pese a que el equipo haya conseguido un gol más que en la pasada campaña a estas alturas. Pero, sin mirar resultados, la sensación que transmite el equipo es de bajón. En todas las líneas y escalafones de la plantilla. Sin importar la edad que marque el DNI. 

En su rueda de prensa, Babin ha salido a parapetarse entre las críticas y los guajes. Consciente de que esta situación puede hacerle más daño a los jugadores que están empezando en el mundo del fútbol, el central redirigió las críticas. "Si tengo que pedir algo a 2022 es que no mateis a los jóvenes. Machacar a los capitanes, a mí que tengo el culo más pelado que ninguno, a Mariño, a Marc Valiente. Pero a ellos no", explicó Babin ante los medios. Una protección parental a capa y espada del veterano central del Sporting para unos jóvenes a los que también les está pasando factura el mal momento del Sporting. 

Dentro del descenso grupal de estos dos últimos meses, los jugadores llamados a lucir el nombre de Mareo por toda España, también han bajado sus prestaciones. Los jugadores como Pablo García o Gaspar Campos, que el año pasado tiraron la puerta del primer equipo con fuerza, han visto como el año de su asentamiento en Segunda división no está saliendo como era de esperar. Al lateral le está costando hacerse con un hueco por delante de Kravets. Además, el canterano tampoco ha sacado todo el rédito posible ante las ausencias de Kravets. Está costando ver al Pablo García que encandiló a la afición rojiblanca el año pasado. 

El caso de Gaspar es bien distinto. Comenzó la temporada como un tiro. Con goles, refrescando al equipo desde el banquillo o aportando mucho desde el once inicial. Parecía su año. Tan bueno estaba siendo que la llamada de la selección española sub 21 no se hizo esperar. Gaspar se perdía quizás la cita más esperada para un jugador formado en Mareo: el derbi asturiano en el Carlos Tartiere. Tras debutar con el equipo de Luis de la Fuente, el gijonés regresó a Mareo para seguir luciendo. Pero su fútbol disminuyó tras pisar Las Rozas. De la mano del resto del equipo, el rendimiento de Gaspar también ha bajado en comparación con su inicio de campaña. El Puma Rodríguez parte ahora con ventaja de cara a Gallego, aunque el gijonés sabe que una nueva convocatoria del '18' con Panamá le volverá a abrir las puertas del once a finales de mes.