Una semana sin descanso y con entrenamiento en El Molinón
El Sporting preparará el partido ante el Alavés de este sábado con una semana muy intensa de trabajo
La victoria del lunes no permite el descanso. Después de despachar una de las mejores actuaciones de la temporada, el Sporting de Gijón volvía al trabajo esta mañana en la Escuela de Fútbol de Mareo. Lo hacía con una jornada regenerativa para los jugadores que más castigo físico recibieron ante el Eibar y con una sesión de trabajo para los menos empleados. La principal ausencia de la sesión fue Pedro Díaz, quien realizó trabajo específico de recuperación tras irse lesionado en la segunda parte de El Molinón.
El '8', el mejor en el partido ante el Eibar, se marchó con una molestia en la misma zona que le dejó fuera de los planes de Abelardo hace unas semanas. Su evolución marcará su disponibilidad de cara al partido ante el Alavés. La plantilla del Sporting empezó a preparar el partido del sábado. Lo hace sin día de descanso. El hecho de haber jugado de lunes ha provocado que Abelardo no pueda ofrecer a su equipo un día libre, por lo que el Sporting se entrenará de manera diaria hasta el viernes, día en el que viajará a primera hora hacia Vitoria. Ya en tierras vascas, tendrá un entrenamiento el propio viernes.
La novedad esta semana estará en el jueves. Abelardo ha programado una sesión en El Molinón. Desde la aparición del hongo Pyricularia, que castigó con dureza el césped del estadio gijonés, el Sporting de Gijón había apartado su trabajo del municipal. Todo se había desarrollado en Mareo, donde incluso tampoco se pudo trabajar en el Pepe Ortíz, también castigado por los hongos. La mejora también ha llegado al principal campo de las instalaciones rojiblancas, donde el filial ya ha podido empezar a disputar sus partidos.
En las últimas jornadas, el estado del césped de El Molinón ha mejorado. Este lunes ofreció mucho mejor aspecto en el partido ante el Eibar. Ese paso adelante puede ser uno de los detonantes para que Abelardo haya decidido que su equipo trabaje en el estadio después de varios meses de ausencia. Un escenario de altura para preparar un partido de altura. Para afrontar la cita ante el Alavés, el técnico del Sporting no descansa y se aferra al templo.