Una sequía que tiene su explicación

El partido de este jueves ante el Fútbol Club Barcelona será uno de los más exigentes de la temporada para el Real Oviedo. Los carbayones tendrán en frente al mejor equipo de la campaña pasada por su condición de campeón y uno de los más en forma en este inicio de liga. Sus números así lo avalan: 13 puntos de 15 posibles y 16 goles a su favor, resultando a su vez el mejor equipo en ataque de toda la competición.

No puede decir lo mismo el Real Oviedo, que en cuestión de caudal ofensivo está muy lejos de los números del Barça. Si los culés son los que mejor puntería han demostrado hasta la fecha, todo lo contrario el equipo de Paunovic. Con tan solo un gol a su favor, los azules están a la cola en este ranking particular. Un rédito que solo les ha permitido ganar un partido -frente a la Real Sociedad- y les ha impedido sumar en el resto de las jornadas disputadas.

Esta sequía tiene su explicación. O al menos, hay una razón que deja en evidencia la escasa producción ofensiva de los carbayones: el Oviedo es el segundo equipo de Primera división que menos veces ha disparado. En estas cinco jornadas, los azules solo han tirado 31 veces, solo una más que el Getafe, colista en este aspecto del juego. Sin embargo, y a diferencia de los asturianos, el conjunto de Bordalás lleva ya seis goles, un bagaje que le ha permitido ganar tres partidos. Por encima de los oviedistas, Osasuna y Valencia, ambos con 34 envíos. En el caso de los rojillos, con cuatro tantos a su favor, mientras que los ches -eso sí con un partido más-, con ocho dianas.

En lo que respecta al Oviedo, estos 31 disparos se desglosan de esta manera. 13 han ido a puerta, resultando el equipo que menos veces ha disparado entre palos de toda la categoría. Y los 18 restantes o bien se han ido fuera o se han estampado en el poste. Un escaso bagaje de cara al arco rival que está lastrando el crecimiento azul en este inicio de competición. El Barça de Hansi Flick medirá este jueves esta debilidad de los carbayones. Ya lo decía el proverbio: "Quien no tira no marca".