Y un año después, Gaspar Campos

11 de mayo de 2024. Visitaba El Molinón un Andorra desterrado de la pelea por la permanencia. El Sporting de Miguel Ángel Ramírez buscaba ganar para seguir soñando con lo que luego se convirtió en realidad. Lo hizo a través de una goleada ante el equipo andorrano (5-2) con goles de Cote, Otero por partida doble, Queipo y Nacho Méndez. Uno de los tantos que marcó el colombiano llegó tras una asistencia de Gaspar Campos. El extremo gijonés, un año después, vuelve a regalar gol. 

Con la excepción del brillo de César Gelabert, la irrupción de Gaspar Campos fue la nota más positiva del encuentro del Sporting de Gijón ante el Deportivo de la Coruña. No jugó en la posición en la que se siente más cómodo, pero recuperó lo que tanto disfrutó con Ramírez: la libertad. Tuvo margen de movimiento para deambular por cualquier zona del campo y encontró los huecos para hacer daño en la zaga del Deportivo. Llevó los primeros ataques del Sporting, se encontró con el palo y le dio a Nico Serrano su primera asistencia de la temporada. 

No está siendo el año más sencillo para el '7' rojiblanco. Los contratiempos físicos le han cortado el ritmo, haciéndole detenerse hasta en cuatro ocasiones. Con tres jornadas por delante, la meta de Gaspar es finalizar la temporada en el mejor estado posible para dejar un buen sabor de boca en el cuerpo técnico antes de las vacaciones. Ya avisó Garitano que iba a medir la ambición y la mentalidad de la plantilla de cara a lo que está por venir. En ese sentido, tras un año complicado, Gaspar buscará demostrar valía. 

El extremo gijonés buscará también incrementar sus números de aquí al final de año. Suma tres goles y una asistencia, siendo este su año menos productivo desde su llegada al primer equipo del Sporting de Gijón. En la temporada 2020-2021, participó en cinco tantos (tres goles y dos asistencias). Intercambió los guarismos en la siguiente campaña (dos goles y tres asistencias). Su año de 'mili' en Burgos sirvió para colocarle en el foco tras finalizar el año con siete goles. Aunque su despertar total llegaría el curso pasado. A las órdenes de Miguel Ángel Ramírez firmó una primera vuelta de escándalo y finalizó el curso con 10 goles y dos asistencias. 

Ese Gaspar con libertad y descaro apareció en El Molinón ante el Deportivo de la Coruña. Y eso que lo hizo en la banda derecha, la menos natural para él como explicó su entrenador. "Puede jugar en muchas situaciones porque tiene la mentalidad, el hambre y el gol. Juega más cómodo en la izquierda. No es fácil lo que ha hecho, ha aguantado bien. Es un jugador muy importante. Tenemos que ir viendo como recupera y que esté en las mejores condiciones para la temporada que viene", analizó Garitano. Un técnico que se mostraba deseoso de contar con Gaspar semanas atrás y que ya sabe lo que tiene entre manos.