La Crónica: El Real Oviedo se despide con honor de la Copa del Rey

El partido no había comenzado, pero ya había una victoria: la ilusión que se reflejaba en los ojos de todos los que nunca vieron al Real Oviedo competir con los más grandes. El ambiente era espectacular y el cuadro carbayón salió en tromba con dos saques de esquina, pero la primera clara fue un remate de Morata que buscó la escuadra. Más tarde, Tomeu Nadal despejó un tiro lejano de Marcos Llorente. 

Transcurrían los minutos y el Atlético de Madrid se hacía con el control territorial del encuentro. No obstante, sin demasiados sobresaltos. Y en el 15, llegaba la más clara para los asturianos. El centro desde la izquierda que ponía Hugo Rama tenía mucho peligro y Obeng casi hacía el primero en boca de gol. No era un espejismo, los locales se lo creerían. Tarín fallaba un remate dentro del área que impedía al Tartiere estallar a punto de cantar el primero. Después, tras una incursión de Viti por la banda derecha, un magnífico centro no encontró certero a Obeng para conectar el disparo.

Sin embargo, a un rival como el de este miércoles no se le puede perdonar. Marcos Llorente abría el marcador con un remate de volea que pegó en el suelo antes de superar a Tomeu Nadal. El gol de los rojiblancos no acabó con el empuje, pero el Atleti ya estaba más tranquilo. Los colchoneros tenían el encuentro donde querían y Griezmann casi amplía la diferencia tras un centro de Álvaro Morata. Desde ese momento, poco más sucedió. Eso sí, Viti tras zafarse de dos rivales tenía una gran ocasión al filo del descanso. Se llegaba al tiempo de asueto con un Tartiere volcado y el sueño intacto.

Tras la reanudación, Álvaro Cervera buscaba más mordiente. Para ello, quitó a Koba e introdujo en el campo a Borja Bastón. Era quien tenía la primera nada más salir con un remate lejano que se perdió a la derecha del poste defendido por Oblak. A partir de ahí, el empuje del Oviedo no era suficiente para poner la igualada y el Atlético de Madrid confiaba en su pegada para sentenciar la eliminatoria. Simeone sacaba a la sensación rojiblanca, Pablo Barrios y a Kondogbia para volver a dominar un centro del campo que había perdido.

Los minutos seguían pasando sin que hubiera nada reseñable y el Real Oviedo había conseguido uno de sus objetivos: llegar vivo al tramo final del encuentro. En el minuto 74, Cervera se decantaba por Sangalli. También por el debutante Sequeira. El argentino forzaba el primer saque de esquina nada más entrar en contacto con el esférico.

Simeone daba aire fresco al equipo y Cervera metía a Luengo por Abel Bretones que se retiraba por problemas físicos . El Oviedo apretaba, pero faltaban ideas en los metros finales. Y fruto de los espacios, el Atleti encontró la suya y ejecutó el plan a la perfección. Pablo Barrios recibía un pase de Correa y sentenciaba el duelo. A partir de ahí, el mismo guion hasta que el colegiado indicó el final del encuentro. El Oviedo decía adiós a la Copa del Rey, pero el público despedía a los suyos con honores.