Cuestión de prioridades: Primer mandamiento, cumplido

El plan de reconstrucción de Álvaro Cervera continúa dando pasos adelante, aunque aún quedan importantes tareas pendientes

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Dani Calvo
Abel Bretones y Dani Calvo intentan robar un balón a Juan Otero
Lun, 11/09/2023 - 22:35

Después de cuatro jornadas, a la quinta fue la vencida. Por primera vez esta temporada, el Real Oviedo consiguió dejar su propia portería a cero. El buen papel defensivo de los azules no les dio para sumar de tres, el objetivo principal, pero al menos permitió al cuadro de Álvaro Cervera no irse de vacío en el derbi asturiano ante el Sporting de Gijón, y así sumar su tercer punto en este inicio de competición.

Fue un botín escaso, a tenor de la necesidad de los azules por ganar, pero un primer paso para empezar a reconstruir su propia identidad, esa que permitió a los azules evitar el descalabro el curso pasado cuando Álvaro Cervera llegó al banquillo azul. "Por lo menos hemos conseguido dejar la portería a cero. Además, llevamos dos partidos que no empezamos perdiendo en la primera parte", destacó un Álvaro Cervera que trató de ver el vaso medio lleno al final del encuentro.

Así todo, para el técnico guineano no es suficiente, si bien aún quedan tareas por completar, como por ejemplo en el aspecto ofensivo. "¿Es mejoría? Sí. ¿Te vale para ganar? No. Es una pequeña mejoría", apuntó el preparador oviedista, que aún debe ir tachando tareas pendientes de su cuaderno de bitácora.

Dejar la portería a cero por primera vez no sirvió para sumar de tres, pero al menos significó un punto de inflexión en lo puramente mental. Es decir, elevar el nivel de confianza en el sistema defensivo azul, cuestionado en las primeras semanas de competición. Al final, el objetivo de no encajar representa el primer mandamiento del planteamiento propuesto por Álvaro Cervera.

No solo impulsa el estado anímico de los futbolistas, también el de Leo Román. El guardameta ha tenido que recoger un balón de la red en cada uno de los enfrentamientos anteriores, a pesar de que en alguno de los casos no haya tenido responsabilidad en el gol encajado. El ibicenco despachó un gran partido ante el Sporting de Gijón, demostrando una mayor seguridad en sí mismo que en duelos anteriores. Además, evitó el gol en la única ocasión clara de los rojiblancos protagonizada por Hassan en la primera parte.

Una vez puesto el tic verde en esta tarea pendiente, ahora el Real Oviedo tratará de trabajar en dos frentes. Primero, en darle continuidad desde el próximo lunes en Andorra. Y segundo, mejorar su productividad goleadora, de momento muy escasa.