El plan de Sarabia ataca a la idea de Ramírez: ¿La primera batalla perdida?

Una partida entre dos de los entrenadores más jóvenes de la Segunda división que promete un buen mediodía de fútbol en el Estadi Nacional de Andorra. Eder Sarabia (42 años) y Miguel Ángel Ramírez (38 años) se medirán por segunda vez en el mismo escenario. Hace una temporada, el Andorra le ganaba la partida al Sporting tras una segunda parte de mucho cambio táctico del conjunto asturiano que terminó por desarbolar a los rojiblancos, inmersos ya de por sí en una dinámica negativa. Ramírez busca venganza. Lo intentará hacer fiel a su estilo, algo complicado en casa de Sarabia. 

Los cinco primeros partidos de la temporada del Sporting, sin mirar al resultado, han dado luz verde al plan de Ramírez del control del partido. Ante Valladolid (53%), Mirandés (51%), Racing de Ferrol (55%), Burgos (55%), Oviedo (54%) y Tenerife (52%), los rojiblancos lograron imponerse en el apartado de la posesión. Controlando el esférico, el Sporting se defiende y ataca. Una dinámica que parece complicado mantener en Andorra. Y es que el equipo de Eder Sarabia es el conjunto con mayor control de balón de la categoría. 

En su último partido en casa ante el Oviedo de Cervera, el equipo de Sarabia consiguió el 64% de la posesión. Un control del esférico que no se tradujo en disparos a puerta, más allá del penalti transformado por Lobete y que sirvió para sumar tres puntos. A través del manejo de la pelota, el Andorra busca hacer suyos los partidos. Algo que se vivió en el partido del curso partido entre Ramírez y Sarabia. El Sporting finalizó aquel partido con un 35% de posesión, uno de los índices más bajos desde que el canario se hizo cargo del banquillo del Sporting. 

En sala de prensa, Ramírez hablaba sobre el plan de partido, abriendo el abanico de opciones que puede ofrecer el mediodía de fútbol en Andorra. "Va a haber tiempo y lugar para tener el balón y no. Tendremos que transitar bien y tener control (...) Tenemos que ser conscientes de que el Andorra quiere el balón y es fuerte teniéndolo. Vamos con la convicción de competir mejor que el año pasado", explicó el canario. 

Siendo consciente de que será complicado mantener la posesión del balón más que el rival, el Sporting ha afinado la puntería durante la semana. Sesiones con mucha carga de ejercicios de finalización con el objetivo de ser certero. Una puntería que, de momento, no le ha acompañado fuera de casa. Dos goles anulados (Valladolid y Ferrol) es lo único que pudo 'festejar' el Sporting lejos de El Molinón. Una primera celebración que el conjunto gijonés buscará en Andorra en una batalla entre dos entrenadores jóvenes y amantes del buen fútbol.