El Real Oviedo dispara sus cifras

El Real Oviedo disfruta del momento más dulce de todo el curso. Así lo justifican sus resultados en el último mes de competición: cuatro victorias y un empate en las últimas cinco jornadas. Es decir, trece puntos de quince posibles. Una racha que les ha permitido pasar de la decimosexta posición, con cinco puntos de ventaja con respecto al descenso, a la octava, con doce de margen y la permanencia matemáticamente conseguida, tras el empate del Málaga ante el Huesca de Ziganda.

Esta cadencia de resultados es la más productiva de toda la temporada, a pesar de que en noviembre los azules también encadenaron cinco partidos consecutivos sin perder. Por aquel entonces, los de Álvaro Cervera consiguieron vencer al Granada, Mirandés y Tenerife, y empataron ante la Ponferradina y Las Palmas. Sobre quince, los carbayones alcanzaron diez, dos puntos menos que en la actual.

Atendiendo solamente a las victorias consecutivas, los carbayones se acercan al mejor momento desde que aterrizaron en el fútbol profesional en 2015. Fue en el tramo final de la temporada pasada, cuando los carbayones consiguieron, con Ziganda en el banquillo, hasta seis victorias seguidas ante Fuenlabrada, Cartagena, Leganés, Sporting de Gijón, Alcorcón y Mirandés. Una racha que les permitió llegar a la última jornada con opciones de colarse en el play off de ascenso, el objetivo marcado esta temporada, pero difícilmente alcanzable, dado que los azules están a siete puntos y restan doce por jugarse.

Este buen momento de los azules coincide con el de mayor puntería. Los carbayones llevan cinco jornadas viendo portería, además en tres de ellos marcando más de un gol, lo que se les ha resistido durante buena parte del campeonato: dos ante el Lugo, dos frente al Ibiza y tres el sábado ante la Ponferradina. Una buena cadencia que, curiosamente, coincide en un tramo en el que los azules no han podido contar con Borja Bastón, el actual pichichi del equipo con ocho tantos.