La temporada más atípica de Marco Sangalli

El Real Oviedo ha vivido este año una temporada de récord en la que ha firmado sus mejores números desde el regreso al fútbol profesional en el año 2015. La solidez defensiva y la efectividad goleadora de Bastón fueron las principales armas del conjunto de Ziganda que peleó por entrar en play off hasta el último minuto del último partido de Liga. El golaverage particular volvió a dejar nuevamente a los ovetenses fuera de los puestos de promoción de ascenso en una campaña atípica y complicada, en especial, para Marco Sangalli. 

El futbolista donostiarra ha vivido este año su peor temporada en cuanto a minutos se refiere. Desde que debutó en Segunda División con el Alavés en la campaña 2014/2015 nunca había jugado tan poco. El gran estado de forma de Viti, desde el primer momento, hizo que el vasco apenas entrase en las alineaciones de Ziganda y finalizase la competición con 1.215 minutos disputados, la cifra más baja de su carrera. En el Alavés, Mirandés, Alcorcón y en sus dos primeros años en el Real Oviedo, Sangalli siempre superó la barrera de los 1.400 minutos jugados.

Además, y teniendo en cuenta la poca participación que ha tenido este año, el extremo ha finalizado esta campaña sin anotar ningún gol, algo que no le había pasado en las últimas seis temporadas. Pese a no disfrutar de un gran año, Sangalli fue protagonista y crucial en el triunfo ante el Mirandés en un partido en el que fue titular y en el que firmó con una asistencia y provocó un penalti. 

"Al final, hay ciertos valores como la solidaridad y el compañerismo que son fundamentales en un vestuario. Si estás dentro de una plantilla, lo importante es aportar y cuando te llega el momento, dar el mejor nivel. Si uno tiene claro esto desde joven, mucho mejor", explicó el donostiarra al término del choque ante el Mirandés. Tras un año atípico en lo personal, Sangalli espera poder recuperar su mejor versión para la próxima temporada y volver a ser un jugador determinante para el Real Oviedo.