Las claves de la Junta del Sporting este martes

El Grupo Orlegi se presentará este martes por tercera vez ante los accionistas del Sporting de Gijón. Las cuentas que serán sometidas a votación corresponden al primer ejercicio bajo la propiedad del grupo mexicano. Las del curso 21-22, aprobadas tras la compraventa del paquete mayoritario de acciones, correspondían a la gestión anterior. 

Ya son públicos los números cerrados hasta el 30 de junio de 2023, pero son desconocidos los que se refieren a la estimación de cara al actual balance. Ese aspecto será la principal novedad que saldrá a la luz durante la Junta convocada para este martes a las 11.00 horas. 

Así, como dato más general, el Sporting de Gijón dará a conocer su presupuesto para la temporada 2023-24. El del año pasado, de "transición" según dijo Irarragorri, fue de 15.136.273 euros. En ese sentido, es probable que la facturación prevista sea mayor a la presupuestada en noviembre de 2022. 

Otra cifra significativa será la estimación de ingresos por la campaña de abonados, que con seguridad superará los cuatro millones de euros. Los fondos obtenidos por la primera fase, la de verano, ya están contabilizados, por lo que la desviación sólo podrá afectar a la segunda fase que aún está abierta.

Por otra parte, la cifra de negocios prevista para el año pasado fue menor a la que finalmente contabilizó el club a 30 de junio de 2023, lo que indica que el Grupo Orlegi podría seguir la línea de elaborar un presupuesto conservador que, con el desarrollo de los meses, después se vea mejorado. Sin ir más lejos, la entidad asturiana anunció unas pérdidas de casi 7 millones en el curso anterior y, cerrado el balance, estas se quedaron en poco más de 5 millones de euros. 

Precisamente el déficit será uno de los aspectos centrales del nuevo presupuesto. La misión del Grupo Orlegi, y la de cualquier entidad, es la de tener equilibrio entre los gastos y los ingresos. El traspaso de Pedro Díaz contendrá las pérdidas, la recaudación en taquilla hasta la fecha también está siendo notable, mientras que el club sigue ocupado en mejorar sus números de publicidad y patrocinios. Salvo sorpresa, el Sporting volverá a presupuestar más gastos que ingresos.