Mal momento para ser delantero del Sporting
Los atacantes rojiblancos siguen sin encontrar el camino del gol y cada vez tienen menos participación en el nuevo esquema
Real Sporting
En Las Palmas, el Sporting de Gijón sumó un punto y carácter. El equipo rojiblanco demostró esa pizca de entrega y competitividad que venía demandando durante varias jornadas. Nada que ver, sin ir más lejos, con el equipo que cayó derrotado en El Molinón ante el Mirandés. A pesar de no conseguir el premio de los tres puntos, el Sporting contagió espíritu. Y ante la falta de producción ofensiva, menos es nada.
Los goles continúan siendo el mayor hándicap desde la llegada de Miguel Ángel Ramírez. Ocho tantos repartidos en 10 partidos es el rédito que le ha sacado el nuevo entrenador a la producción ofensiva del Sporting. Una cuantía que aumenta el partido ante el Mirandés en el que el conjunto rojiblanco no dio la sensación de poder competir por los puntos durante la totalidad del choque. Al igual que en un amplio porcentaje de la temporada del Sporting, el conjunto de Ramírez no termina de dar con la tecla para enchufar a sus delanteros. Unos hombres que, poco a poco, han ido desapareciendo del plan.
De los ocho tantos de Ramírez, tres han sido obra de Dani Queipo, dos de Pedro Díaz, dos de Aitor y otro de Djuka. El balcánico es el único delantero de los cinco con los que cuenta la actual plantilla del Sporting que ha conseguido marcar en este 2023. La lesión del '23' tras romper su sequía puso otra traba más a la producción ofensiva. Ante la falta de producción de los puntas, la segunda línea ha dado un paso adelante con Queipo y Pedro como principales estandartes.
Los delanteros rojiblancos no solo han desaparecido de la producción ofensiva. Poco a poco, también ha ido desapareciendo de los planes del entrenador. Djuka y Campuzano, por razones médicas. Milo y Jeraldino, por decisiones técnicas. Cristo es el único delantero que ha jugado en todos los partidos con Miguel Ángel Ramírez. Sin embargo, en el último partido salió con el tiempo prácticamente cumplido. Y no ha jugado como delantero con el canario.
Peor suerte corrieron Jeraldino y Milo. El chileno, tras superar sus problemas físicos, volvía a las convocatorias pero no se movía del banquillo. Se le ha visto calentar pero no aparecer en el césped. Desde que aterrizó en Mareo ha sumado 33 minutos en más de dos meses. Su última participación fue ante el Tenerife. Desde entonces poco, o más bien nada, de Jeraldino.
Más méritos había acumulado Milo. Ramírez alabó su trabajo en rueda de prensa pero las recompensas han sido las mismas. El serbio ha jugado en cuatro partidos de los 10 que acumula Ramírez y solo una titularidad. Fue, además, en la derrota ante el Mirandés. Con el cambio de sistema ha sido uno de los sacrificados y acumula dos partidos consecutivos sin participar. A estas ausencias se suman las de Campuzano y de Djuka, sin jugar desde el Carlos Belmonte por lesión. Sin delanteros puros, Ramírez ha delegado esa labor en nombres como Otero o Aitor. Con Cristo transitando entre el centro del campo y la delantera, se reafirma que no es un buen momento para ser delantero del Sporting.
