Una de cal y otra de arena en El Requexón
Lucas entrena con normalidad junto al resto de sus compañeros mientras que Luismi fue la ausencia destacada por precaución
Nueva semana de entrenamientos para el Real Oviedo, que esta vez será más larga de lo habitual porque los azules tendrán hasta cinco sesiones para preparar el encuentro ante el Alcorcón. A primera hora de la mañana pasó por los micrófonos de la sala de prensa Jimmy Suárez, uno de los capitanes del equipo. Y poco después, sobre el césped de la ciudad deportiva apareció Lucas Ahijado, que por primera vez desde su lesión de tobillo se entrenó al mismo ritmo que el resto de sus compañeros.
El ovetense ya se reincorporó parcialmente la semana pasada a la dinámica grupal, pero solo realizaba la parte del calentamiento y después entrenaba al margen. Y hoy realizó la mayor parte de la sesión junto a sus compañeros, a excepción del partidillo final, en el que entrenó al margen, pero aun así apunta a entrar en la convocatoria este domingo. La otra gran novedad fue la ausencia de Luismi Sánchez, que fue sustituido el pasado sábado en Lezama por una sobrecarga. "Estaba muy cargado del aductor. En la primera parte no ha sido el Luismi que nos tenía acostumbrados. No estaba dando mucha salida. Hablé con él, estaba cargado y he decidido quitarle. Espero que no sea mucho", aseguró Carrión. Y hoy no ha entrenado por precaución, pero su presencia el domingo no corre peligro.
Y ante el elevado número de bajas, que cada vez es menor –actualmente Ibarra, Paulino y los tres lesionados de gravedad–, Luis Carrión sigue tirando del filial oviedista y hoy contó con los habituales Sesé, Yayo, Aimar Collante y también con Dieguito, futbolista en edad juvenil. El conjunto azul volverá a entrenarse mañana a las 10:30 horas y hará lo propio el resto de días hasta el sábado, día en el que hablará el técnico Luis Carrión.