Volver a los orígenes

El Real Oviedo buscará ante el Villarreal B reconducir el rendimiento defensivo, después de encajar ocho goles en los últimos cinco partidos

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Luis Carrión
Luis Carrión, en un entrenamiento en El Requexón
Mié, 27/03/2024 - 19:26

Decía Juan Antonia Anquela, en una entrevista concedida en Radio MARCA Asturias hace apenas unos días, que el Real Oviedo "aún vive de muchas cosas que el anterior entrenador había inculcado". Indudablemente, el jienense se refería a conceptos defensivos que Cervera había impregnado en el esquema azul y Luis Carrión, tal y como reconoció en más de una ocasión, no dudó en conservar. Al menos hasta donde su estilo, totalmente opuesto al de su predecesor, le permitiera.

Al poco de aterrizar el técnico catalán en el banquillo del Real Oviedo, los azules echaron el cerrojo. De hecho, a partir de la tercera jornada con Carrión, los carbayones acumularon seis jornadas consecutivas sin encajar ni un solo gol. Esta inercia les hizo sumar tres victorias y tres empates que a la postre desembocaron en la reacción que motivó el cambio de objetivos para la presente temporada. Es decir, dejar de mirar para el descenso y empezar a soñar con con cotas más altas.

A partir de noviembre, el candado se reabrió en la portería azul y se hizo más habitual el intercambio de golpes en cada partido. Así todo, el Real Oviedo demostró más pegada que los contrincantes y pudo sumar victorias de prestigio: ante el Eibar (2-1), Elche (3-2) o Racing de Ferrol (1-3). Incluso un meritorio empate en El Sardinero (2-2).

Tal fue la inercia, que el Real Oviedo empezó a olvidarse de lo que era dejar su propia a portería a cero. Desde aquella racha de imbatibilidad en noviembre, ya han pasado 18 encuentros, y solo en tres Leo Román no tuvo que recoger balones del fondo de la red. De hecho, este balance se agravó recientemente: ocho goles en contra en las últimas cinco jornadas.

Por todo ello, los azules quieren empezar a crecer a partir de una sólida defensa. No es que sea este el primer mandamiento de Luis Carrión, pero sí un recurso que en su momento permitió escalar posiciones y, al mismo tiempo, generar una mayor confianza para la línea defensiva, incluido el portero Leo Román, quien pelea por hacerse con el trofeo Zamora esta temporada.