De comercial telefónico a ser el mejor entrenador de Segunda: Así se 'hizo' Rubén Albés

"Lo conozco desde hace años. Me contactó cuando estaba en Brasil, antes de su llegada al Lugo. Me gusta mucho lo que hace y cómo lo hace. La riqueza táctica que le da a sus equipos te hace cuestionarte qué va a hacer. No sé con qué me va a sorprender". Para hablar de la cara camaleónica de los equipos de Rubén Albés, las palabras del técnico que precede. Miguel Ángel Ramírez destacaba del nuevo entrenador del Sporting su virtud de adaptarse a las situaciones, un técnico con muñeca y capacidad de adaptación. Un perfil más que atractivo para la Segunda división que ha encandilado solo con su llegada a la afición rojiblanca. 

Con Miguel Ángel Ramírez coincide en varias cosas. Un entrenador joven, sin una experiencia previa en el fútbol profesional como jugador y apasionado del análisis. El técnico vigués se forjó en el fútbol base, dio pasos hacia el profesionalismo a través de varias canteras de talento como Valencia, Valladolid o Celta para llegar al profesionalismo en el Anxo Carro.

Tocó pelear desde bien pronto. A los 25 años, Albés se convertía en el técnico más joven del fútbol español en categoría nacional. Lo hacía entrenador al Burjassot, equipo de las categorías inferiores valencianas "Desde el primer día quise ganarme el respeto, la gente va creyendo en tí", explicaba en un reportaje realizado por 'El Día Después' hace 14 años. El cambio a nivel profesional ha sido intenso. 

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Desembarcó en Paterna donde conoció al exrojiblanco que le cambiaría la vida. Benito Floro le acogió en su equipo de trabajo y comenzaron las experiencias de nivel. En Marruecos fue el segundo entrenador al Wydad de Casablanca, donde sufrió impagos que le hicieron tener que buscarse la vida de otra manera. "Estuve en una compañía de teléfonos trabajando como comercial durante tres meses. Es un trabajo dificilísimo que te permite desarrollar una sensibilidad con respecto a la persona que tienes enfrente. Recomendaría a todos los hijos que trabajaran un determinado tiempo de comerciales, porque creo que es una experiencia muy chula", añadía en una charla con Relevo. 

Su trayectoria volvió a coger ritmo de la mano de otros grandes entrenadores. Miguel Ángel Portugal fue su valedor en el Valladolid tras hacer las veces de segundo en el conjunto vallisoletano. En la cantera pucelana y en la de Vigo se terminó de foguear antes de dar el salto a nivel internacional ya en soledad. El Hermannstadt rumano fue su experiencia, con una etapa de poco más de cuatro meses. Luego volvería para aterrizar definitivamente en su casa, en su Lugo. 

Allí dio pasos hacia delante hasta llegar a ser el 'Miguel Muñoz' de Segunda división. Un premio que reconoce su labor durante los partidos, los planteamientos y la forma de conseguir sacar su rendimiento al equipo. Un técnico bravo y sin miedo. "¿Por qué no puedo ir a este campo y jugar igual que lo hago en casa, o por qué si voy ganando no voy a ir a por el segundo, apartándome de lo políticamente correcto?", reflexionaba el entrenador que apuesta por el 'fútbol canalleta', una filosofía que empieza a calar en el sportinguismo.