De la “timidez inicial” a la euforia final: Ante el Eibar llegó la segunda del año 

El pasado domingo el Real Oviedo consiguió una victoria de mucho prestigio. En primer lugar por el rival, una Sociedad Deportiva Eibar que acumulaba 10 partidos sin conocer la derrota y que llegaba al Carlos Tartiere como el equipo más en forma del campeonato. Y, en segundo, por las formas. El conjunto azul recibió el gol poco antes del descanso tras una primera parte muy igualada. Y tras el paso por los vestuarios todo cambió: el equipo fue valiente y obtuvo su recompensa. 

Pero, ¿qué ocurrió para ver ese cambio tan radical en la segunda mitad? Luis Carrión fue claro en la rueda de prensa posterior. «En la primera parte hemos estado muy tímidos en defensa y protegiendo demasiado. Nos vamos 0-1 al descanso. En la segunda arriesgamos un poco más. En el descanso les he dicho: “¿Queremos ser un equipo tímido en defensa protegiendo hacia atrás?" No tiene ningún sentido. Somos un equipo valiente, que arriesga. Con extremos altos, el punta también alto... Conseguimos el 2-1».

Gracias a esa charla y a los tantos de Borja Bastón y Santiago Colombatto, el Oviedo certificó la primera remontada de la temporada con suspense para seguir avanzando puestos en la tabla. La jornada ha sido muy prolífica para los intereses carbayones, pues de los 11 primeros clasificados solo el Espanyol y el Racing de Santander consiguieron la victoria. La remontada ante el Eibar fue la segunda en lo que va de 2023, prueba inequívoca de lo que le cuesta al equipo asturiano darle la vuelta al marcador. 

El otro precedente fue ante la Ponferradina allá por el mes de mayo. Al Oviedo se le puso muy cuesta arriba el encuentro con un 0-2 a la media hora, pero en la segunda parte el equipo salió con una intensidad mucho mayor y en el 64’ ya habían certificado la remontada. Un 3-2 que no se movería de ahí al final del choque y que permitía a los carbayones seguir con su brillante racha de resultados.