El final más cruel posible para Femenías y Montiel

La noche de ayer prometía para dos futbolistas que la pasada campaña se quedaron a las puertas de jugar el playoff de ascenso con el Real Oviedo. Joan Femenías y Joni Montiel, ambos pertenecientes al Levante UD, se medían al Alavés en la vuelta de la final por conseguir el tan ansiado ascenso a Primera División, pero un penalti en el 128' acabó con el sueño granota, que continuará una temporada más en la categoría de plata. 

Al conjunto valenciano le valía el empate en su casa, ya que al quedar por delante del Alavés cualquier escenario en el que no ganasen los babazorros serviría para conseguir el objetivo, aunque el destino les tenía deparado un final muy cruel. Cuando el encuentro estaba visto para sentencia, una mano de Rober Pier volvía locos a todos los integrantes del banquillo visitante. Hernández Maeso no vio nada desde el campo pero desde la sala VOR le llamaron para revisar la jugada. Tras varios minutos, el colegiado señaló pena máxima. 

En ese momento el principal protagonista y objeto de rezo por la mayoría de aficionados levantinistas era Joan Femenías. El manacorí podía convertirse en héroe, pero Asier Villalibre le engañó a la perfección, ajustando su remate al palo izquierdo de la meta del guardameta. de esta forma se puso fin a la temporada y el curso que viene, al menos Femenías, volverá a enfrentarse al Real Oviedo. 

La situación de Femenías y Montiel ha sido muy diferente a lo largo del año. El mediocentro llegó en una operación exprés, cuando todo hacía indicar que volvería a jugar en Asturias y ha tenido mucho protagonismo durante toda la temporada. A sus 24 años, el curso 22/23 ha sido el de su confirmación, dejando de ser un simple revulsivo como años atrás. En total, ha participado en 47 encuentros, en los que ha conseguido anotar siete goles y repartir cuatro asistencias. Cedido por el Rayo Vallecano y con contrato hasta 2024, este verano tendrá que sentarse a hablar para decidir su futuro. 

Por su parte, Femenías tuvo un año más complicado. Con Cárdenas como titular, solo una grave lesión del guardameta le permitió ser titular. Desde el mes de abril lo ha jugado todo y, a pesar de algún error que costó puntos, en líneas generales ha tenido un rendimiento satisfactorio. 16 encuentros en los que consiguió dejar su portería a cero en seis ocasiones. 

El no ascenso, aparte del palo anímico que supone, también es un difícil contratiempo en lo económico para el Levante. Ya no solo por el dinero que deja de ganar (se espera que los recién ascendidos tengan un incremento de unos 50 millones en sus presupuestos) sino por la deuda que mantiene y que crecerá. Además, este año ya no tendrá la ayuda por el descenso, por lo que no podrá mantener el gran bloque de futbolistas –muchos de ellos con nivel de Primera– la próxima campaña y tendrá que poner en el mercado a jugadores como Jorge de Frutos o Campaña.