El frío adiós a Rubén Albés en el Sporting de Gijón

El final de la semana supuso el final de la etapa de Rubén Albés en el Sporting de Gijón. La derrota ante el Tenerife y todo el ambiente generado en El Molinón en los últimos meses fue la gota que colmó la paciencia de la dirección deportiva rojiblanca y de la afición. Se marchó del Sporting el entrenador llamado a capitanear el tercer proyecto del Grupo Orlegi en el conjunto gijonés. Situado en el centro de la diana, su fichaje levantó tanto optimismo como desilusión deja su rumbo. Rubén Albés se va del Sporting en un punto muy distinto al que llegó en el mes de junio. Dejará su hueco a Asier Garitano, como informó Killer Asturias esta mañana. 

Fue el nombre del verano y la apuesta de Orlegi apuntaba a ganadora. Era un técnico deseado en el fútbol español, con buen cartel. Su perfil apuntaba a encajar en lo que necesita el Sporting tras un buen año a las órdenes de Miguel Ángel Ramírez. De ahí la fijación de la dirección deportiva en el técnico gallego. Fue el principal objetivo del verano y la primera gran victoria en el mercado. Sin embargo, el transcurso de la temporada ha ido minando la imagen de un entrenador golpeado por los resultados. 

Se va Rubén Albés del Sporting con un bagaje de 36 partidos entre liga y Copa del Rey. Su balance final fue de 10 victorias, 14 empates y 12 derrotas. Dos caras mostró su Sporting. De codearse con los mejores en el inicio de temporada a situarse en una zona cercana a la catástrofe en el momento de su adiós.

La dirección deportiva había depositado el voto de confianza de cara al partido ante el Tenerife. Prueba de ello es que no se habían sondeado otras opciones, confiando en la reacción por parte del técnico gallego. Pero la derrota ante los canarios, la imagen del equipo y el ambiente de El Molinón firmó su sentencia. 

El final de Rubén Albés en el conjunto gijonés fue amargo. Se fue del césped de El Molinón en medio de una soberana bronca. Sin mirar atrás, el técnico gallego encaró el túnel de vestuarios ajeno a lo que ocurría en un estadio enfurecido. Ya en sala de prensa, su rostro reflejaba el aspecto anímico que escondía. Salió de El Molinón pasadas las 12 de la noche, encontrándose de nuevo con una afición de morros. Acompañado de su cuerpo técnico, Albés agachaba la cabeza y intentaba dar explicaciones a una masa social que no estaba para muchas gaitas. 

El domingo supuso su final. A primera hora de la mañana, acudió el técnico a Mareo para ser notificado de despido. Tras mantener un encuentro con la directiva, Rubén Albés se despidió del grupo deseándole la mejor de las suertes, recogió sus enseres personales y abandonó la Escuela de Fútbol. Una despedida que no ha trascendido al plano público. Algo habitual en estos casos es que algún miembro del vestuario se pronuncie a través de las redes sociales. No ha sido el caso. Una despedida que sí se produjo de forma interna en una jornada de domingo interna. 

Llegada de Asier Garitano
A rey muerto, rey puesto. Asier Garitano aterrizará en Asturias este martes para emprender su nueva etapa en el Sporting de Gijón, como informó este medio. El técnico vasco volará desde Tenerife al Principado y tomará tierra en torno a las 12:45 horas. De ahí pondrá rumbo a Gijón, donde conocerá a la directiva rojiblanca antes de su primer entrenamiento en Mareo. El planning establecido es que Asier Garitano firme su nuevo contrato con duración hasta 2026, tal y como informó Killer esta tarde. El miércoles tendría lugar la presentación del nuevo técnico rojiblanco ante los medios de comunicación.